Escenas casi de guerrilla a las puertas de los astilleros de Navantia, en Cádiz, donde piquetes y antidisturbios han intercambiado lanzamientos de piedras y pelotas de goma en unos duros choques que se han vivido en la primera jornada de huelga indefinida en el sector del metal por el bloqueo del convenio.
Las bengalas en lo alto de madrugada, al grito de “¡Quieren guerra, pues guerra!”, hacían presagiar lo que iba a ocurrir hoy al amanecer, cuando un piquete cortaba con barricadas de fuego el acceso a los astilleros.
En paralelo, el fuerte dispositivo policial rodeaba a los manifestantes, que han lanzado piedras y todo tipo de objetos tras atrincherarse tras una valla metálica.
Mientras, los antidisturbios contestaron con pelotas de goma desde varios flancos y contratacaron a la intensa lluvia de piedras con gases lacrimógenos.
Es el resultado de la huelga del metal tras el bloqueo de las negociaciones del convenio colectivo: “No es que pidamos la subida salarial según el IPC, sino que encima nos quieren quitar unos 300 euros, cosa que vemos inviable a estas alturas”, denuncia un afectado, representando al sector.
Esta primera violenta jornada se ha saldado con un detenido y cuatro agentes heridos y ha convertido en un escenario de guerra a la Bahía de Cádiz.
La falta de acuerdo para renovar el convenio colectivo ha sido el detonante de esta huelga indefinida, que tuvo como preludio dos jornadas la pasada semana que según los sindicatos fue cumplida por el 100% de los trabajadores.
Para la Federación de Empresarios del Metal de la provincia (Femca), las subidas del 2, 2,5 y 3 por ciento anual que piden los representantes de los trabajadores, además de la rebaja de cuatro horas de trabajo cada año, conllevaría "la desaparición de la industria gaditana, que tendría que competir con la de otras provincias que parten de una situación más ventajosa".
Así, la Femca ha expresado que Sevilla tiene un coste de la categoría de peón de 10,55 euros por hora, frente a los diez euros de Málaga, mientras que "en Cádiz se partiría ya desde 12,16 euros".
Además, otro de los obstáculos surgido en este convenio es el que ha supuesto la negociación del Plus Penoso, Tóxico y Peligroso, que cobran los trabajadores en función del trabajo que desempeñan.
Por su parte, los sindicatos defienden que han hecho una plataforma reivindicativa "con los pies en el suelo para no perder tiempo de negociación". Asimismo, argumentan que en la provincia de Cádiz históricamente el sector del metal ha sido un sector muy importante para la economía y critican que la Femca "siga poniendo en tela de juicio la necesidad de la subida del convenio del metal de Cádiz comparándola con otros convenios colectivos de Sevilla y de Málaga".