Los paros convocados por la huelga de transportistas iniciada el pasado 14 de marzo, está provocando situaciones desfavorables en múltiples empresas. La última que ha dado la señal de alarma ha sido Danone que ha alertado en un comunicado que “en caso de no alcanzarse una solución de forma inmediata tendrá que detener su actividad en el plazo máximo de 24 horas de forma temporal su actividad tanto en sus 4 plantas en España de productos lácteos, como en las 3 de agua mineral natural".
De momento, el paro sigue adelante a pesar del paquete de 500 millones de euros ofrecido por el Gobierno. Ayudas que no han terminado de gustar a las patronales Fenadismer, Fetransa y Feintra que se han sumado al paro.
“De no llegar a un acuerdo en las próximas horas, Danone se verá obligado a tomar la drástica decisión de interrumpir el proceso de recogida de leche, y como consecuencia, el proceso de producción en sus fábricas y posterior traslado de producto terminado a las cadenas de distribución alimentaria”, ha asegurado la empresa.
Este parón tendría un gran impacto a nivel nacional, ya que en la actualidad en España, Danone tiene empleados a 2.000 trabajadores repartidos en diferentes plantas de producción e instalaciones en ocho autonomías, abasteciendo a más de 13,5 millones de hogares. Por tanto, esta decisión provocaría “la interrupción de suministro tanto de agua mineral natural como de productos lácteos a nivel nacional”.
Desde Danone han asegurado que hasta el momento han llevado a cabo “sus máximos esfuerzos” con el objetivo de mantener toda su actividad dentro de la normalidad, a pesar de las dificultares que se han generado a raíz de “un contexto difícil y muy tensionado”. A pesar de todo el esfuerzo dedicado, este parece no ser suficiente, ya que han indicado que “la inaudita situación de inestabilidad y el agravamiento de los paros ya están comenzando a afectar al aprovisionamiento de materias primas esenciales para sus productos como leche entera o nata”.