Los funcionarios se van a encontrar el próximo mes de octubre con una ‘paguilla’ derivada de un incremento en su nómina por la subida de la inflación. Concretamente, será de un 0,5% y con efectos retroactivos desde enero de 2023.
El incremento salarial es fruto del Acuerdo Marco para una Administración del siglo XXI, firmado por los sindicatos CCOO y UGT con el Gobierno en la Mesa General de las administraciones públicas, y se produce tras conocerse los últimos datos de inflación, que sitúan en el mes de septiembre la tasa de variación anual estimada del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) en el 3,2%.
De acuerdo con lo acordado, las nóminas de los empleados públicos se elevarían en 2023 un 2,5% fijo, con la posibilidad de dos subidas variables, de 0,5% cada una. La primera se aplicará si el IPC armonizado de 2022 y 2023 –hasta septiembre según el dato adelantado–superaba el 6% y la segunda variable del 0,5% operaría si el PIB nominal en 2023 superaba el previsto por el Gobierno (2,1%).
A este respecto, siguiendo los protocolos previstos, ahora el Instituto Nacional de Estadística (INE) tiene que comunicar sus datos oficialmente al Departamento y después tiene que ir a Consejo de Ministros, tal como refieren fuentes del Ministerio de Hacienda Función Pública citadas por Europa Press, que añade que fuentes sindicales han confirmado que esta tarde se celebrará una reunión de la comisión de seguimiento del Acuerdo Marco.
Esa cita contará con la presencia del Gobierno y de los sindicatos firmantes del acuerdo CCOO y UGT para abordar el tema.
En base al acuerdo, con la confirmación este jueves de que en el mes de septiembre la tasa de variación anual estimada del IPCA se sitúa en el 3,2%, el indicador acumulado desde el 2022 (5,5%) supera el 6%, por lo que tendría que producirse este nuevo incremento máximo del 0,5% en el salario de los funcionarios en octubre, que será retroactivo desde el mes de enero del 2023.
Además, en 2023, si el incremento del PIB nominal es igual o superior al que aparece estimado en el cuadro macroeconómico que acompaña a los Presupuestos Generales del Estado (2,1%), se aplicará otra subida complementaria de un 0,5%.
Este posible incremento complementario del año 2023, de carácter consolidable, tendría efectos de 1 de enero de 2023 y es muy probable que se produzca, ya que el propio Gobierno ha adelantado que el PIB crecerá por encima de la estimación oficial (2,1%), como así corroboran organismos nacionales e internacionales que han revisado al alza sus estimaciones, en la mayoría de los casos por encima del 2,1% previsto.
Así, para el año 2024, el incremento salarial fijo será del 2%, sobre la base de las retribuciones ya incrementadas en el ejercicio anterior.
No sería la única noticia positiva para los empleados públicos, que además, adicionalmente a la subida fija del año 2024, si la suma de la variación del IPCA de los años 2022, 2023 y 2024 superara el incremento retributivo fijo acumulado de 2022, 2023 y 2024 establecido en los párrafos anteriores, se aplicará un incremento retributivo adicional y consolidable del 0,5%. Este incremento adicional tendría efectos de 1 de enero de 2024.
A todo ello cabe recordar que el acuerdo, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) en octubre del año pasado, incluía para 2022 un incremento fijo de salario del 3,5%, teniendo en cuenta el incremento del 2% ya aprobado en la Ley 22/2021, de 28 de diciembre, de Presupuestos Generales del Estado para ese año.