La inflación ya no distingue entre rentas: ricos y pobres se enfrentan a la misma tasa

  • A diferencia de lo que ocurrió en 2021, los niveles de IPC soportados por los diferentes niveles de gasto en 2022 fueron muy parecidos

  • La subida de productos como el transporte, hoteles y restaurantes afecta tres veces más a las rentas altas, según un análisis de EsadeEcPol

  • Cualquier cambio en el precio de la electricidad, que cae un 30% en diciembre, afecta mucho más a los hogares vulnerables

En el año 2021 vimos claramente una inflación de ricos y de pobres. Los segundos tuvieron que soportar un encarecimiento superior del coste de la vida. ¿Por qué? Porque el incremento del IPC se nutría, básicamente, de la subida de luz. Pero 2022 fue diferente: los precios ya no se limitaron al sector energético, sino que se extendieron al resto de productos y servicios. Así que en media, todos los niveles de renta se enfrentaron a un mismo IPC.

"Que tengan la misma tasa no significa que les afecte de la misma manera", matiza Ángel Martínez Jorge, autor junto a Javier Martínez Santos de este estudio de EsadeEcPol. "Las rentas más bajas destinan mayor porcentaje de sus ingresos al consumo y por lo tanto, les impacta más la subida de precios".

Lo raro, dice este economista, es lo que vimos el año pasado: que la inflación fuera mucho mayor para los colectivos con menos ingresos. "Eso es como el peor de los mundos". La diferencia entre el decil 1, los que menos cantidad gastan, y el decil 10 se situaba en dos puntos en el año 2021 tal y como muestra la diferencia de la curva azul: 7,6% versus 5,3%.

"Esta abultada distancia se explicaba gracias a la composición de la propia inflación, que estaba movida esencialmente por los elevados precios de la electricidad y, en menor medida, de los alimentos, dos de los principales gastos de los hogares más pobres", explica el estudio.

Este año la curva por deciles es mucho más plana. Significa que la inflación, digamos más personalizada por grupos en función del nivel de gasto, ha sido similar. Tanto que la del decil 1 y la del decil 10 es la misma: un 5,4%. El IPC general de diciembre cerró en el 5,7%, su cifra más baja desde noviembre de 2021.

"Este año el IPC es mucho más homogéneo entre hogares de diferente capacidad económica, con variaciones que apenas ascienden a unas décimas", según los autores del estudio.

¿Por qué es relevante saber cómo es la inflación de cada grupo? "Lo es porque el IPC se toma como un indicador de inflación al que nos enfrentamos todos como si fuera el mismo. No lo es porque es una media de consumo de un hogar español. Es importante saber si existe una desigualdad en la inflación, por ejemplo, a la hora de actualizar determinadas ayudas", explica Martínez Jorge

¿Cuáles son las claves de este resultado?

A diferencia del año pasado, este 2022 los precios de la electricidad han caído un 30% respecto al cierre del año anterior. El efecto de esta rebaja del precio de la luz es muy considerable, especialmente entre los hogares menos pudientes. Para ellos supone reducir la inflación en 1,59 puntos y para los hogares con mayor capacidad económica es la mitad lo que resta.

Este comportamiento de la electricidad "ha aliviado el peso desproporcionado que la subida de alimentos y gas han tenido sobre estos hogares específicos", según este análisis.

En el sentido contrario ha actuado el encarecimiento de hoteles, restaurantes y transporte, "sobre todo los coches nuevos en este último apartado", apunta Martínez Jorge. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) el precio de un automóvil nuevo ha subido un 10%.

"Estas dos categorías aportan 0,75 puntos al IPC de los hogares con menor capacidad económica (primer decil) mientras que suponen el triple, casi 2,2 puntos para los hogares más pudientes", concluyen los autores del estudio.

Esto se explica porque son los más ricos los que mayor gasto destinan a estos bienes y servicios: un tercio del total. En el caso contrario es casi la mitad, un 17% del gasto.

Incluso sin tener en cuenta el efecto amortiguador que ha supuesto la caída de los precios de la electricidad en el cierre del año, las tasas de inflación de unos y otros habría sido relativamente parecida, explican los economistas de EsadeEcPol. Y esto se explica, en gran parte, por el comportamiento de los precios de esos bienes que se consumen en mayor proporción por los hogares más ricos. Sus precios apenas aumentaron en 2021 y este año se han encarecido más el IPC general.