El jugador Rafa Mir llamó por teléfono a una de las chicas que lo denunciaron por agresión sexual para pedirles que no lo hicieran. Antes, las habían echado de la vivienda, dejándolas desnudas en la calle.
Una de las chicas ha explicado que mantuvo relaciones sexuales consentidas con el jugador. Mientras ,la otra joven, la de 21 años, estaba en la piscina con dos amigos de Rafa Mir -uno de ellos Pablo Jara, también investigado-.
La joven de 21 años cuenta lo mismo a la Guardia Civil y ante la Policía Nacional en el Hospital de la Fe de Valencia.
En la denuncia, a la que ha tenido acceso el diario Las Provincias, cuenta que Rafa Mir apareció en el jardín y la metió en la piscina a la fuerza y con ropa. Él iba en calzoncillos.
En la piscina se produce la primera de las agresiones sexuales, a pesar de que ella le dijo “verbalmente y de forma contundente que la dejase y que no quería que hiciera eso, llegando esta agresión a consumarse durante cinco minutos”.
Tras la primera agresión sexual, la denunciante sale de la piscina y entra en el interior de la vivienda para coger sus cosas pero no tiene móvil. Con el móvil de su amiga localiza el suyo en la discoteca, donde habían estado antes, y llama a su padre para que vaya a buscarla. Sin embargo, el hombre se persona en el local, donde geolocaliza el teléfono.
La denuncia, recoge, según el citado diario, que la chica sale a la calle a esperar pero se da cuenta de que no lleva el bolso. Vuelve a entrar para recuperarlo y en ese momento, el jugador la lleva por la fuerza al baño, que cierra con pestillo y la vuelve a agredir.
Mientras, la amiga golpea la puerta y le afea que esté con él después de que ha estado con ella. La chica logra empujar a Mir y escapa del baño.
Coge sus cosas y muy nerviosa sale de la vivienda. Su amiga que se percata de su estado la acompaña pero sin sus pertenencias porque pensaba volver.
Rafa Mir y sus amigos salen tras ellas, les piden que se calmen porque van a llamar la atención de los vecinos. Los tres hombres vuelven a la casa y tras ellos, la chica de 25 años lo intenta para recoger sus objetos personales. No la dejan y le quitan hasta la toalla. Se queda en ropa interior.
Ellos le tiran los objetos por encima de la tapia de la vivienda cuando ven que un vecino, que llamó a la policía, se ha cruzado con ellas en la calle.
Los agentes de Policía atienden a las mujeres. La joven de 21 años asegura que Rafa Mir llamó a su amiga para pedirle que no lo denunciara.
La amiga corrobora la llamada de seis minutos, en la que dice que se interesa por el estado de la chica y por si ha denunciado. Ella le dice que no sabe qué ha hecho pero que ella misma ha denunciado a Pablo Jara.
El jugador asegura que es inocente y que las relaciones sexuales fueron consentidas. Está en libertad provisional con medidas cautelares.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.