Los progenitores saben de la dificultad que conlleva compaginar las aficiones con el cuidado de los bebés cuando estos llegan a nuestra vida. Hay quien decide aparcar los hobbies durante un tiempo hasta que los bebés se hacen algo más mayores, pero este no es el caso de Jacob Simonsen, un atleta danés que decidió unir su pasión y su compromiso de padre.
Jacob Simonsen, de 28 años, pretendía correr la media maratón de Aarhus, pero cuando llegó el momento no tenía con quién dejar a su bebé de 1 año, Viggo, así que decidió llevárselo consigo. Desde la organización no le pusieron problema y cuando dieron el pistoletazo de salida ahí estaba Simonsen con el carrito y el pequeño dentro.
El atleta tenía miedo de que Viggo comenzase a llorar una de las posibles razones que le hicieron ir más deprisa y conseguir así un récord, logrando la marca de 1 hora,8 minutos y 4 segundos en realizar la media maratón, 21 kilómetros.
Jacob no se podría creer el récord mundial que había conseguido, además con el hándicap de haber tenido que empujar un carrito de bebé que pesa más de 20 kilos y el peso del niño.
“Fue bastante especial correr con él, se pasó casi toda la carrera durmiendo, pero también fue bastante duro ya que sólo tienes una mano dirigiendo. Pero ¡imagina tener un récord mundial antes de haber cumplido un año! Es un momento muy especial para que Viggo lo pueda contar cuando se mayor”, afirmaba el atleta en sus redes sociales.