Una psicóloga propone varias recomendaciones para decirle a tu pareja que no tienes ganas de sexo
Gloria tiene 26 años y desde hace varios meses su libido ha disminuido drásticamente. “No me apetece”, y aunque entiende perfectamente que es una fase y que no hay nada malo en ello, se siente culpable ya que su pareja sí que quiere sexo. “No sé cómo decírselo, no quiero que se piense que ya no me gusta o algo así”.
Lo que le ocurre a Gloria es muy frecuente, y es que el apetito sexual fluctúa en función de muchos factores. Además, no siempre es idéntico al de nuestra pareja, lo que puede ocasionar algún conflicto que, bien gestionado, fortalecerá la relación. En cambio, si se convierte en un tema tabú o te sientes presionado, es muy posible que la relación adquiera dinámicas tóxicas.
Si tu apetito sexual ha bajado en las últimas semanas, es importante que no te culpes, que no te obsesiones y, sobre todo, que no te fuerces a tener sexo para complacer a tu pareja cuando a ti no te apetece.
Lo mejor que puedes hacer es escucharte e intentar descubrir por qué tu libido es más baja. No para "solucionarlo", porque no tiene porque ser un problema, sino para entender a tu cuerpo y a tu mente.
Problemas de pareja. El sexo y el afecto van de la mano en la pareja. Si estás enfadado con la otra persona, tus ganas de sexo disminuirán. Por ejemplo, si estás harto de que no haga nada en casa, si sientes que no te hace caso o te desatiende, si últimamente discutís más, etc.
Monotonía sexual. Cuando el sexo se vuelve rutinario, puede disminuir la libido. Por eso es importante añadir estímulos eróticos nuevos antes del sexo (ponerte guapo para tu pareja como en las primeras citas, intentar seducirla, decirle cosas bonitas…) y durante el sexo (usar juguetes, juegos de rol, nuevas prácticas…).
Causas médicas. Numerosas enfermedades afectan al deseo sexual, entre ellas el coronavirus. Una de las secuelas más frecuentes de la Covid-19 es la fatiga, y si estás agotado física y emocionalmente, también puedes tener menos ganas de sexo. Otra causa médica son los medicamentos con efectos secundarios sexuales como los antidepresivos.
La fase del ciclo menstrual. No podemos ignorar la influencia de las hormonas en el apetito sexual. A lo largo del mes puedes sentir muchos cambios influenciados por el ciclo menstrual: en el sueño, en el hambre, en la irritabilidad, en la ansiedad, en las ganas de socializar y, por supuesto, en la libido.
Cómo decirle a mi pareja que no quiero sexo
En pareja el sexo debe ser algo natural. No se puede convertir en un tabú o en una conversación prohibida. Tenemos que sentirnos cómodos hablando tanto de lo que nos gusta como de lo que no. Si tu apetito sexual disminuye, no tienes que actuar como si nada forzándote a llevar el ritmo sexual de tu pareja.
A la hora de mantener esta conversación, lo más recomendable es:
Explicarle por qué no te apetece tener sexo. Como decía antes, es importante escuchar a tu cuerpo y a tu mente para entender por qué tu apetito sexual ha disminuido. Tómate el tiempo que necesites para ello. Así podrás explicar a tu pareja cómo te sientes y por qué te sientes así.
Evitar culpabilizaciones. Ni te culpes a ti, ni culpes a tu pareja. La libido depende de muchos factores y cambia a lo largo de la relación. No es justo que te machaques a ti ni que responsabilices exclusivamente a la otra persona.
Explicitar tus necesidades. Tienes menos ganas de sexo, pero, ¿qué quieres hacer al respecto? Quizá quieres esperar unas semanas a ver si mejora, o añadir alicientes al sexo como juguetes sexuales. Tanto tú como tu pareja debéis dejar claro qué es lo que os gustaría cambiar y cómo queréis cambiarlo.
Reforzar la intimidad en otros ámbitos. Que haya menos sexo no significa que debáis descuidar vuestra intimidad como pareja. Podéis aprovechar para daros más mimos, para hablar de vuestras emociones de una forma más profunda o para hacer más planes románticos.
red flag, sino que también es una forma de abuso y violencia.