Dorothy Hoffner, la mujer estadounidense de 104 años que conquistó el récord Guinness de la paracaidista más mayor del mundo hace algo más de una semana, murió el pasado domingo mientras dormía en la residencia de mayores de Chicago de la que era usuaria. La anciana hizo historia el pasado 1 de octubre al saltar en paracaídas en tándem, superando a una ciudadana sueca de 103 años que sostenía la anterior marca.
Según fuentes como 'The New York Times', Hoffner solía saltar en paracaídas de forma frecuente. Por ello, aquella mañana ya legendaria para ella, no estaba "nerviosa". De hecho, "no tenía ni idea de que iba a romper el récord mundial". Todo el mundo quedó "muy impresionado", tal y como confesó la propia protagonista. Ella solo recurrió a un experto, un instructor, y le dejó "hacer todo el trabajo".
El salto de Dorothy Hoffner hace 10 días:
Derek Baxter, el instructor de Skydive Chicago que saltó con Hoffner, confesó al mismo diario que su objetivo principal en ese salto era asegurarse de que ella "pudiera levantar las piernas durante el aterrizaje". "Lo hizo mucho mejor que la mayoría de la gente", dijo Baxter al finalizar el descenso, el salto número 10.402 de su carrera. El vídeo del salto muestra a Hoffner mirando a su alrededor con los ojos bien abiertos debajo de las gafas y su suéter azul celeste ondeando mientras se lanza en paracaídas, aparentemente relajada.
Cuando aterrizó y comenzaron a hacerle preguntas sobre cómo fue el salto dijo que se había sentido "cómoda allí arriba". Algo más de una semana después, la anciana estadounidense ha fallecido en la residencia de Brookdale Lake View. Aunque, aún no se ha determinado oficialmente la causa de su muerte, el recuerdo de Hoffner en las alturas será siempre un ejemplo de desafío y valentía.