Un joven irlandés de 18 años se sintió por unas horas el hombre más rico del mundo gracias a un error bancario que multiplicó por mil el dinero que había ingresado en su cuenta. Dane Gillespie había recibido un cheque de su abuela por valor de 8,900 libras esterlinas (unos 10,300 euros) y lo depositó en el banco. Pero cuando consultó su saldo, se quedó boquiabierto al ver que tenía 8.9 millones de libras esterlinas (más de 10 millones de euros) en su cuenta.
Su madre, Caroline, contó al medio local Belfast Live que su hijo no podía creer lo que veía y que incluso bromeó con comprar un Porsche. “Mi hijo creyó que los millones le habían caído del cielo, al menos por unas horas. Apenas vio su cuenta, me dijo entre risas que iba a comprarse un Porsche. ¡Qué ilusión!”, dijo Caroline.
Sin embargo, la madre le hizo volver a la realidad y le explicó que se trataba de un fallo del banco, que era la sucursal de Nationwide en Donegall Place, en el centro de la ciudad, y que debían devolver el dinero cuanto antes. El banco corrigió el error que habían cometido y les ingresó la cantidad correcta.
“Para un chico de 18 años, sentirse millonario por un día es algo que no se olvida fácilmente. Estaba eufórico, como si todos sus cumpleaños hubieran coincidido en un solo día. Pero al final, todo volvió a la normalidad. Eso sí, con una anécdota que contar para el resto de su vida”, finalizó Caroline.