Una mujer ha convertido su piso en México en un hospital para colibríes. Tiene unos 60 que revolotean por las habitaciones de la casa. A algunos los ha rescatado y estos después han tenido crías que siguen a su lado, convirtiéndose en la salvadora de los colibríes.
Catia Lattouf los cuida y los lleva en sus manos a un pichón de colibrí, es uno de sus pacientes que ingresó a su casa de rehabilitación que tiene en su apartamento de la capital de México, en el que ha salvado de la muerte a cientos de estas diminutas aves en los últimos 10 años.
Los colibries no le temen y se dejan acariciar por Lattouf que les examina la cabeza y el cuerpo. Muchos están enfermos, otros heridos. Esta mujer de 73 años que se ha convertido en la salvadora de las aves, las ayuda en su recuperación y las alimenta hasta que son mayores para volar, según la web de Los Angeles Times.
Lattouf asumió como parte de su vida cotidiana esta labor por los colibríes y convirtió su piso en la exclusiva barriada capitalina de Polanco, en un hospital para aves donde ahora atiende a 60 colibríes enfermos o heridos o pichones que cayeron de sus nidos. Todo empezó cuando la mujer acababa de superar un cáncer y se encontró un colibrí con un ojo desprendido tras el ataque sufrido por otra ave.
El hospital de esta mujer se ha convertido en una referencia para los amantes o especialistas en aves que suelen pedirle asesoría y apoyo para salvar a colibríes en México y otros países de Latinoamérica. El hospital también sirve de apoyo a investigadores de universidades mexicanas.
En México se estima que hay unas 57 especies de colibríes y alrededor de 350 en el continente.