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A la hora de viajar en avión, aunque puede que haya algunos asientos más seguros que otros, según ciertas webs especializadas, son las preferencias de cada uno lo que hará que vayamos más o menos cómodos y nos hayamos decantado por escoger entre ventana o pasillo al comprar el billete. Por cierto, ese no fue el motivo por el que se viralizó la respuesta de una azafata a un pasajero impaciente durante un vuelo entre Estambul (Turquía) y Nueva Delhi (India).
Excepto en tarifas 'premium' o 'executive', solemos poder elegir el asiento, disponible casi siempre 24 horas antes de despegar, cuando compramos el billete. No obstante, si se viaja en una aerolínea 'low cost', la elección del asiento estará sujeta a un suplemento económico. Un precio que variará y se incrementará según se acerque el momento del vuelo.
Por norma general, según indica el blog 'Bob', los asientos tienen numeración en las filas y se distribuyen por letras, siendo siempre la 'A' el asiento de ventanilla del lado izquierdo del avión hasta la letra 'F' en caso de tener 6 asientos o 'H' si cuenta con 8 por fila.
Las ventajas a la hora de ir en ventana es que evitaremos molestias con el ir y venir de los pasajeros, veremos el exterior tanto en el proceso de despegue como en el aterrizaje, podremos controlar el parasol en caso de que nos incordie la luz natural y podremos dormir mejor, o al menos más cómodos, ya que tendremos el fuselaje de la cabina del avión para apoyar la cabeza. Suelen ser los más anhelados.
Las ventajas de sentarse en el pasillo es que no molestaremos tanto al resto si solemos ir al baño a menudo o habituamos a caminar por el pasillo central. Y lo de ir al servicio a tiempo puede parecer una tontería, pero no lo es. Recientemente, sancionaron a Air India con 35.000 euros después de que un pasajero orinara a una mujer en pleno vuelo. Asimismo, el ir en pasillo nos permitirá desembarcar a una mayor rapidez y, si no hemos tenido que facturar, llegar antes al destino con nuestro equipaje de mano.
De este modo, aunque insistimos que sobre gustos no hay nada escrito, se puede considerar como uno de los peores asientos del avión los que van entre dos o más personas, es decir, sin contar con pasillo o ventanilla.
En cuanto a las filas, la primera y la de salida de emergencia son aquellas que más espacio tienen para las piernas, ideales para las personas altas. No obstante, cabe destacar que los asientos que están situados en frente de la salida de emergencia no se pueden reclinar de ningún modo por motivos de seguridad.
Además, la última fila de la aeronave no está considerada como la mejor elección ya que los asientos no son reclinables y suele ser más ruidosa tanto por los motores como por los baños. Es, también, donde más se notan las turbulencias, tan importantes para quien tenga miedo a volar.