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Una monja budista es considerada toda una gurú de la cocina a nivel mundial. Asesora a los mejores chefs del mundo y que hoy hemos tenido la oportunidad de conocer aquí en nuestro país.
La cocina de Jeong Kwan no necesita estrellas Michelín para ser una estrella de la cocina.
Verla manos a la obra hoy en Madrid es una auténtica exquisitez porque Jeong Kwan siempre está entre fogones sí, pero en un templo, en Corea del Sur.
Vive allí 47 años y 50 sin probar la carne, el pescado, los huevos o la leche.
Cocinando todo tipo de frutos, raíces y flores, esta monja budista se ha convertido en gurú mundial de la dieta vegana.
Su ingrediente estrella nos dice que es la paciencia. Cuando cocina una hortaliza la ha visto crecer en su huerto. Utiliza una raíz de loto que ha macerado en sal durante tres años o una salsa de soja fermentada durante cinco.
Prohibidos el ajo y la cebolla porque aumenta la libido. Hay que cocinar dice con humildad, para hacer feliz y compartir los manjares.
Los mejores chefs del mundo peregrinan a su monasterio para aprender sus recetas de vida.