¿Cómo adelantar la ITV sin perder días de vigencia?

Con la llegada del verano y las vacaciones a la vuelta de la esquina son muchos los conductores que quieren realizar la puesta a punto del coche y así estar preparados para los viajes propios de la época estival. Ese ‘todo en regla’ es sinónimo de vacaciones tranquilas; saber que podemos circular, que nuestro vehículo funciona correctamente y que, en principio, no nos va a caer una multa por haber hecho las cosas mal. Estas fechas suelen coincidir con otro trámite bien conocido por los amantes de la carretera. A muchos les tocará pasar la Inspección Técnica del Vehículo, un examen obligatorio que evita más de 15.000 siniestros cada año, según un estudio de la Universidad Carlos III de Madrid.

Como es lógico, también habrá un porcentaje de conductores que van a querer realizar la inspección antes de la fecha límite. Esto suele generar muchas dudas entre quienes no están del todo familiarizados con la normativa y los plazos oficiales para pasar el chequeo anual del vehículo. ¿Podemos adelantarla? ¿Qué dicen las asociaciones?

Cómo pasar la ITV antes de tiempo sin perder días de vigencia

Si atendemos a lo que dice AECA-ITV, una de las principales asociaciones española del sector, es posible pasar la inspección técnica antes de lo que marca la fecha oficial de la tarjeta sin que se modifique el periodo de validez.

En el mismo sentido se pronuncia SGS ITV. Siempre que pidamos cita en los periodos oficiales permitidos, es posible jugar con las fechas para que se adapten a nuestro caso y el examen obligatorio no interfiera en nuestra rutina o nos estropee los días de descanso, por nombrar dos situaciones muy típicas sobre las que muchos conductores aún tienen dudas.

Si es nuestro caso y necesitamos adelantarla un poco, podemos agendar la ITV con la estación autorizada 30 días antes de que caduque oficialmente el periodo referenciado en la pegatina de nuestro vehículo.

Imaginemos que nuestro coche tiene más de diez años de antigüedad y nos toca pasar la revisión año a año. La fecha oficial es un 30 de julio, pero resulta que nos vamos de vacaciones el 20 de junio, tenemos ya todo planificado y no queremos perder días de descanso. En este caso, no habría ningún problema en adelantar la fecha de la inspección y pasarla, por ejemplo, el 18 de julio, dos días antes del viaje. La fecha de la siguiente ITV seguiría siendo el 30 de julio del año siguiente, aunque la hubiéramos pasado 10 o 15 días antes de la fecha referenciada en la pegatina.

La cita podemos pedirla en cualquier estación autorizada. El precio es un factor determinante. Al ser un sector liberalizado parcialmente, podemos plantearnos cambiar de zona geográfica y escoger una estación de ITV con precios más competitivos o aprovechar alguna de las ofertas de verano, ya un clásico. Todo para que, al menos, este trámite nos salga a cuenta.

Si no queremos sorpresas desagradables, es muy aconsejable que hagamos una revisión rutinaria del vehículo antes de llevarlo a pasar la ITV: comprobar si funcionan todas las luces, la profundidad del dibujo del neumáticos, el nivel de aceite y de líquido de frenos, los cinturones de seguridad y el resto de áreas. Aunque no lo parezca, en ese examen que no cuesta nada también estamos ahorrando dinero y futuros problemas.