Así puedes cultivar tus propias hierbas aromáticas en casa: en un balcón o en macetas en la cocina
Redacción digital Informativos TelecincoMadrid
Las hierbas aromáticas, frescas y siempre a mano.Dall-E
Tener siempre a mano hierbas aromáticas frescas es muy fácil cultivando tus propias plantas en casa, ya que no necesitan muchos cuidados
Puedes plantar albahaca, romero, tomillo, menta o perejil en una jardinera del balcón o simplemente en macetas en una ventana o en interior
Te damos algunos consejos y trucos para que tus hierbas aromáticas crezcan en casa y estén listas para dar vida a tus platos
¿Te gustaría tener tus propias hierbas aromáticas frescas para darle sabor a tus platos? No necesitas tener un gran jardín ni mucho espacio para cultivar plantas aromáticas en casa, en el balcón o incluso en interiores. Con unos simples consejos y trucos, podrás disfrutar de albahaca, perejil, romero, tomillo y otras hierbas todo el año. Aquí te explicamos cómo:
Elige las hierbas que más te gusten y que se adapten a las condiciones de tu espacio. Algunas hierbas como la albahaca, el cilantro o la menta prefieren lugares soleados y cálidos, mientras que otras como el perejil, el romero o la salvia toleran mejor la sombra y el frío.
Escoge macetas o recipientes adecuados para cada planta. Las macetas deben tener agujeros de drenaje para evitar el encharcamiento y ser lo suficientemente grandes para que las raíces se desarrollen bien. Puedes usar macetas de barro, plástico, metal o incluso reciclar latas, botellas o tazas.
Rellena las macetas con sustrato de buena calidad, que sea ligero, esponjoso y rico en nutrientes. Puedes comprar sustrato específico para plantas aromáticas o hacer tu propia mezcla con tierra, arena, compost y perlita.
Siembra las semillas o trasplanta los esquejes siguiendo las instrucciones del paquete o del vivero. Asegúrate de dejar suficiente espacio entre las plantas para que crezcan sin competir por los recursos. Etiqueta las macetas con el nombre de cada hierba para identificarlas fácilmente.
Riega las plantas con regularidad, pero sin exceso. La frecuencia y la cantidad de riego dependerán del tipo de planta, del clima y del tamaño de la maceta. Lo mejor es regar por la mañana o por la tarde, evitando el sol directo, y comprobar que la tierra esté húmeda pero no encharcada.
Abona las plantas cada dos o tres semanas durante la primavera y el verano con un fertilizante orgánico o natural, como el té de compost, el purín de ortiga o el vinagre de manzana. Así mantendrás las plantas sanas y vigorosas.
Poda las plantas regularmente para favorecer su crecimiento y evitar que se vuelvan leñosas o se sequen. Corta las hojas o los tallos que necesites para cocinar o para hacer infusiones, dejando siempre una parte de la planta intacta. También puedes secar o congelar las hierbas que no vayas a usar en el momento para conservarlas mejor.
Si te gustan las plantas aromáticas y quieres tenerlas siempre a mano, una buena opción es cultivarlas en una jardinera en un balcón. Así podrás disfrutar de su aroma y sabor en tus platos, infusiones o remedios caseros. Además, son muy fáciles de cuidar y no necesitan mucho espacio. Aquí te damos algunos consejos para que puedas tener tu propio huerto urbano de plantas aromáticas.
Elige una jardinera que tenga suficiente profundidad y agujeros de drenaje. Puedes usar una de plástico, madera o metal, pero asegúrate de que sea resistente y no se oxide. También puedes reciclar envases como botellas, latas o cajas de fruta.
Rellena la jardinera con un sustrato adecuado para plantas aromáticas. Debe ser ligero, suelto y con buen drenaje. Puedes mezclar tierra con arena, perlita o vermiculita. También puedes añadir un poco de abono orgánico como humus de lombriz o compost.
Elige las plantas aromáticas que más te gusten y que se adapten al clima y la orientación de tu balcón. Algunas de las más populares son el romero, la albahaca, el tomillo, la menta, el orégano, el perejil, la lavanda o el cilantro. Puedes comprarlas ya germinadas o sembrarlas tú mismo.
Coloca las plantas en la jardinera dejando suficiente espacio entre ellas para que puedan crecer y respirar. No las aprietes demasiado ni las separes demasiado. Lo ideal es que cada planta tenga unos 15 cm de distancia entre sí.
Riega las plantas con moderación y según sus necesidades. No las ahogues ni las seques. Lo mejor es regarlas por la mañana o por la tarde, evitando el sol directo. También puedes usar un pulverizador para humedecer las hojas y evitar plagas.
Cosecha las plantas aromáticas cuando las necesites, cortando solo las hojas o ramas que vayas a usar. No cortes más de un tercio de la planta cada vez, para que pueda seguir creciendo. Puedes secar las hojas o conservarlas en aceite, vinagre o sal.
*Este artículo ha sido generado con ayuda de Inteligencia Artificial y editado por un humano.