Una práctica muy habitual es que después de pasar un rato sumergidos bajo el agua, sacudamos la cabeza para expulsar el líquido de los oídos. Bien, pues un estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Cornell, en Nueva York, asegura que podría causar importantes daños cerebrales, especialmente en los niños. Informa ScienceAlert.
Revelan que la fuerzas de aceleración involucradas en la expulsión de agua del canal auditivo humano podrían exponer hipotéticamente al daño cerebral.
"Nuestra investigación se centra principalmente en la aceleración requerida para sacar el agua del canal auditivo", explicó el estudiante de ingeniería Anuj Baskota. "La aceleración crítica que obtuvimos experimentalmente en tubos de vidrio y canales auditivos impresos en 3D fue alrededor del rango de 10 veces la fuerza de gravedad para los tamaños de orejas infantiles, lo que podría causar daño al cerebro", continuó.
Cabe señalar que el estudio se ha basado en experimentos que simulan la acción de sacudir violentamente la cabeza para expulsar el agua, pero que no involucran a personas reales. Por lo tanto, aunque se puede tomar como referente, no se trata de una prueba clínica y con ello no se puede cuantificar realmente el verdadero impacto que esta práctica podría tener para el cerebro.