Usar una grabadora de llamadas con tu teléfono o smartphone, sea cual sea tu sistema operativo, puede ser muy útil por muy variados motivos. Por ejemplo, para las personas que trabajan manejando entrevistas es necesario contar con un apoyo documental que sirva de prueba sobre la realidad de la conversación, así como en el caso de servicios de atención al cliente y demás prestaciones de servicios o ventas de bienes por vía telefónica. Eso sí, es imprescindible informar a la otra parte de que la llamada va a ser grabada, cumpliendo así con la legislación sobre protección de datos. Por ejemplo, normalmente no se admitirá como prueba en un juicio una grabación que se llevara a cabo sin el consentimiento de una de las partes que intervienen en ella. ¿Qué grabadora de llamadas usar en iOS y en Android?
Lo más habitual es (o era) utilizar apps específicas para grabar llamadas, aunque existe un inconveniente: Google se ha puesto cada vez más estricto con el respeto a la privacidad de sus usuarios y por eso muchas de las aplicaciones clásicas dedicadas a la grabación de llamadas ya no funcionan (en concreto, a partir de Android 9). Parece que una de las pocas aplicaciones que siguen cumpliendo su función usando los últimos sistemos operativos de Google es Call Recorder, una app que puedes descargar desde Google Play y que te permitirá grabar de manera automática las llamadas que desees, así como elegir si quieres que se grabe la llamada completa, o bien tu voz, o la de la otra persona. Esta app se integra, además, con Google Drive, por lo que podrás almacenar tus llamadas en la nube.
En el caso de iPhone y del sistema operativo iOS, la situación es muy similar o incluso más estricta que en el caso de Android. Por eso, las (pocas) aplicaciones que funcionan lo hacen recudiendo a trucos, como establecer una conferencia con un tercer número que será el que se encargue de grabar. Además, suelen funcionar bajo suscripción. Según recogen desde Xataka, existen dos apps a las que puedes acudir: RecMe y HD. Ambas son gratuitas con suscripción y hacen uso de esta vía alternativa, y en ambos casos, inevitablemente, se pierde calidad en la grabación.
Si necesitas grabar una llamada y no funciona ninguno de los métodos anteriores, existen otras vías menos profesionales en el resultado pero efectivas en cuanto a la consecución de tu objetivo. Una de ellas es usar un segundo teléfono o una grabadora para registrar el audio procedente de una conversación que mantendrá con otro terminal.
Simplemente, llama al número que desees y activa el altavoz, pidiendo siempre permiso a la otra persona para que la llamada sea grabada. Si tu interlocutor consiente, activa la aplicación de grabadora en el segundo teléfono y registra el audio. Eso sí, para que la calidad sea lo mejor posible, intenta que los dos terminales estén cerca y que el altavoz se escuche bien. Intenta también grabar en un entorno tranquilo y sin ruidos externos.