Esta semana de junio se produce el pico de actividad de una curiosa lluvia de estrellas que pocos conocen: las Ariétidas. Estos meteoros “invisibles” se precipitarán sobre la Tierra desde una región del espacio donde un cometa ha dejado sus fragmentos tras desintegrarse parcialmente.
Las lluvias de estrellas suelen producirse por la noche, pero ¿qué pasa cuando son por el día? La luz solar hace que los meteoros que cruzan el cielo, procedentes del espacio, se quemen en la atmósfera invisibles a nuestros ojos.
Las Ariétidas son una lluvia de meteoros que se descubrió por primera vez en 1947, y en 1986 se observó un cometa que parecía ser el que daba origen a estas estrellas fugaces diurnas, el 96P/Machholz, que tiene un diámetro de 6 kilómetros y medio. Se trata de un cometa muy curioso, puesto que orbita extremadamente cerca del Sol, más cerca incluso que Mercurio.
Esta semana, la Tierra atraviesa un anillo de su órbita poblado de fragmentos del cometa, que parecerán precipitarse sobre nuestras cabezas desde la constelación de Aries, por lo que recibe el nombre de Ariétidas. Si se produjera por el día, podríamos ver de 60 a 200 meteoros por hora el martes, 7 de junio. No obstante, esto será complicado por su ocurrencia durante las horas de luz solar.
En principio, será prácticamente imposible que veas estas estrellas, puesto que ocurren durante el día y en junio, cuando el sol es protagonista. A pesar de los cielos despejados, su radiante (su aparente punto de partida en el cielo) se sitúa muy cerca del Sol, por lo que su brillo pasará desapercibido.
No obstante, desde EarthSky recomiendan buscar estas estrellas durante el amanecer, o justo al comienzo del crepúsculo, cuando el Sol está “de 12 a 18 grados por debajo del horizonte”.