Todos nos hemos llevado alguna vez una sorpresa desagradable a la hora de hacer la colada. Ropa que encoge, camisetas desteñidas, prendas rasgadas, pérdida de calcetines… Muchas veces nos ocurre esto por un simple despiste, o por desconocimiento al lavar la ropa y se puede evitar con algunos consejos y nociones sobre los programas de lavado y tejidos de las prendas.
Los errores más habituales y sus soluciones
Prendas que encogen
Es un clásico que a todos nos ha ocurrido, principalmente cuando hemos lavado jerseys de lana o prendas de tejidos naturales a altas temperaturas. Para que esto no ocurra, es muy importante que conozcamos de qué material está hecha nuestra ropa, para poder separarla y adaptar cada lavado y temperatura. Lavando a temperaturas más bajas prolongarás la vida de tus prendas, además de ahorrar energía. De hecho, lavar a 30°C en lugar de a 40°C puede ahorrarte hasta un 60% en el consumo de energía. El color, la forma y el tacto original de las prendas se conservan durante más tiempo además del filtrado del agua, que elimina las impurezas para obtener el máximo rendimiento lavando a 30ºC. Esto se consigue gracias a la tecnología Prosense, presente en las lavadoras de AEG.
Suciedad que persiste
Siempre se ha dicho que para eliminar la suciedad más profunda es mejor usar agua caliente, pero esto no tiene por qué cumplirse siempre, ya que se puede lavar a menor temperatura, pero con un programa más específico, que garantizará el cuidado de la ropa.
Muchas veces también abusamos del programa de lavado rápido por comodidad y falta de tiempo, pero esto solo sirve cuando la ropa necesita ser lavada después de un uso normal y esto tiene implicaciones medioambientales, ya que se consume más agua, tiempo y energía, además de no cuidar la prenda, porque sobrelavas la ropa y puede llegar a dañarse. Existen muchos programas especializados en tejidos que ayudan a limpiar la suciedad adaptándose a la prenda: lana, seda, vaqueros, ropa técnica, algodón, etc.
Mezcla de colores
Hay colores, como el rojo o el negro, que tienen muchas papeletas para desteñir. Además, también son los más proclives a ir perdiendo intensidad tras varios lavados. En AEG.
El error que se suele cometer es leer las etiquetas para ver qué programa y temperatura usar para que la ropa no destiña, pero lo cierto es que el etiquetado está obsoleto, (según el estudio de Care Label Project de AEG) donde los usuarios no entienden las etiquetas y además, lo que la gran mayoría no sabe es que las etiquetas de cuidado relacionadas con la temperatura de lavado indican la temperatura máxima de lavado, no la recomendada.
Puedes probar a mojar un algodón en agua templada y dejarlo entre las telas de tu prenda unos 5 minutos. Si al retirarlo se ha traspasado el color, sabrás que es mejor no mezclar esa prenda con distintos tonos. Por eso se recomienda poner las lavadoras por tejidos y colores. ¡Te ahorrarás muchos disgustos!
Restos de polvo o tacto viscoso
A veces nos pasamos de limpios y echamos demasiada cantidad de detergente y suavizante a nuestra lavadora. Los excesos nunca son buenos, y esto puede dejar restos en nuestras prendas que nos obligarán, probablemente, a volverlas a lavar. Para que esto no ocurra, la lavadora de AEG tiene un sistema de autodosificación automática de detergente que utiliza la tecnología Autodose, un sensor dentro de la lavadora que analiza el peso de la carga e identifica la cantidad exacta de detergente y suavizante necesarios para cada ciclo. No solo es práctico y cómodo, sino que también garantiza un mejor cuidado de tus prendas, evitando una dosificación excesiva que pueda degradar las fibras de los tejidos.
Otros consejos para cuidar tu ropa
Si sigues lo que te hemos recomendado anteriormente, ya casi tienes la partida ganada, pero hay algunos detalles que también te ahorrarán disgustos.