Jorge ha recibido una llamada muy especial durante la gala de este domingo de 'Gran Hermano'. El militar se dirigía al confesionario y con el rostro serio y triste, entrecruzaba los brazos, mirando hacia el suelo en diversas ocasiones. Ion Aramendi conectaba con el militar y este confesaba que ver un teléfono ahí le tranquilizaba. Jorge iba a hablar ni más ni menos que con su madre, ya que durante la pasada gala fue el primero en descolgar el teléfono cuando sonó en el salón.
"No valoramos lo que es... soy muy afortunado. Tengo mucha suerte y tengo que agradecer la oportunidad", señalaba, no sin antes asegurar que le gustaría hablar con sus padres: "Cualquiera de los dos sería especial". El presentador de Telecinco le pedía que mirase el teléfono fijamente. Un teléfono que sonaba. "¿Hola?", pronunciaba la madre de Jorge. "Hola mamá", respondía Jorge, desatando lo que iba a ser una auténtica 'lluvia de lágrimas'.
"Aquí tienes tu premio del teléfono, que también lo es para mí. Estamos muy orgullosos de ti, estás haciendo un buen concurso, nos reconforta mucho tu nobleza. No sufras más, disfruta cada momento en la casa, vive una experiencia positiva siempre. Fuera te espera mucho amor de tu familia y de tus amigos... Te queremos mucho y estamos muy agradecidos a todos lo que te apoyan sin conocerte. Te quiero mucho", apuntaba la madre.
Jorge, casi sin poder articular ninguna palabra, les preguntaba si estaban bien y señalaba que si ha hecho algo no ha sido queriendo: "No es mi intención. Somos personas y me equivoco. No es fácil, es muy duro". Un Jorge que cerraba los ojos cada poco tiempo y visiblemente emocionado. Ion le pedía a Jorge que se despidiese y Jorge estallaba a llorar como nunca hemos visto en el concursante: "Te quiero mucho. Gracias". Tras estas últimas palabras, el concursante miraba a cámara y le daba las gracias a todos, tapándose con las manos los ojos: "No puedo hablar".
Jorge se reencontraba con los compañeros y recibía un fuerte aplauso de estos. El militar les contaba que había hablado con su madre y tras sentarse, se rompía de nuevo, recibiendo el apoyo de Violeta y de algún concursante más. ¡Qué momento más emotivo hemos vivido en 'Gran Hermano'! Emoción y sentimientos a flor de piel.