Una de las parejas que más están llamando la atención en 'Gran Hermano' es la que involucra a Laura y Manu. Su relación va como una montaña rusa. Un día pueden protagonizar uno de los besos más apasionados de esta edición y otras veces se distancian, ya sea para que ambos no se encuentren incómodos o para no se creen falsas ilusiones. Esta mañana han salido al jardín de la casa a tomar el sol y se les ha visto muy unidos y acaramelados. Incluso ha llegado a haber un momento de máxima tensión, aunque sin ningún beso.
"Te pega ser una avispa", le cuenta Manu a Laura mientras disfrutan del momento. Los concursantes hablan de las avispas y las abejas, ambos se encuentran apoyados muy juntos y sonriendo sin parar. De hecho, y durante unos segundos, se quedan mirándose fijamente y es Laura la que decide romper el silencio: "Pero no me mires así". El DJ pregunta por qué no puede y se quedan con los ojos clavados el uno con el otro.
Una vez vuelven a hablar, tanto Manu como Laura empiezan a descubrirse el uno al otro contando las series que han visto durante su infancia. "Shin Chan nunca me ha hecho mucha gracia", le cuenta entre risas al DJ. Ambos disfrutan de la mañana conociéndose y hablando de sus gustos y sus vivencias del pasado.
Sin embargo, la situación se vuelve límite cuando ambos deciden recostarse a la sombra, uno muy cerca del otro y respirando muy fuerte. Ambos se miran fijamente, sonríen y se acarician de forma muy intensa. "Creo que se va desinflando", dice Manu en relación al puff en el que se encontraban tumbados. Pasado unos minutos, tanto Laura como Manu reaparecen en la cocina y cada uno se dirige hacia su grupo de amigos de la casa.