Inés esconde un secreto que Tomás descubrió justo antes de morir: su madre no está muerta, sino ingresada en un centro. La realidad es que lejos de mirar por su bienestar, la analista de datos no está escuchando los consejos de los médicos para así proseguir con su venganza por los malos tratos que sufrió en la infancia.
La madre de Inés la maltrató psicológicamente durante sus primeros años de vida. Para Inés, nada de lo que hacía estaba bien y su autoestima se vio fuertemente dañada por los comentarios de su madre. Con el paso de los años, la analista revive muchos de esos episodios, que marcan también las obsesiones y conductas que tiene.
"Su madre ha sufrido una nueva crisis. El estado de su madre es grave, no hay esperanza para ella, solo sufrimiento. La naturaleza es sabia, a veces nos indica que ha llegado la hora de parar y descansar. Lo más caritativo sería dejarla ir", le ha dicho el médico a Inés actualizándole el estado de salud de su madre.
Sin embargo, ella ha decidido desoír por completo los consejos del doctor aludiendo que "no es ético y legal" a pesar del sufrimiento de su madre. Lo cierto es que Inés se está vengando por todo el dolor causado.