Juan Carlos Carracedo, vulcanólogo, comparece en 'El programa de Ana Rosa' para analizar todos los detalles de la erupción, del futuro del terreno y, sobre todo, cómo se crearán las casas en La Palma gracias a la lava que está destruyendo parte de la isla.
En La Palma se ha originado una nueva boca donde sale lava al terreno, algo de lo que el experto dice: "Estos procesos volcánicos son impredecibles y cambian continuamente a través del pulso de la erupción". "Preveíamos desde el principio es que la única sorpresa que iba a dar es su magnitud... es igual a las erupciones que han ocurrido en el recorrido histórico, su magnitud era una sorpresa", matiza el experto.
El experto detalla que todo ha transcurrido con normalidad en la erupción, una lava que ha descendido por la ladera hasta llegar al mar para formar un delta: "Es lo habitual". Sin embargo, Carracedo explica: "Sabemos muy poco lo que es un complejo volcánico, solo sabemos lo que sale. Lo más importante del volcán es lo que ocurre dentro, lo que condiciona el tipo de erupción, el tiempo etc... lo conocemos indirectamente a través de formaciones del terreno o sismisidad... pero no podemos dar predicciones directas".
El volcanólogo explica que ahora "se ha abierto una nueva boca y era de esperar, pero no era seguro que ocurriera". Además, añade: "Lo único que podemos esperar es que ese curso nuevo vaya por las coladas anteriores y no discurra por caminos nuevos, para que no destruya nuevas casas, cultivos, etc..."
Los alrededores del volcán se están cubriendo por un manto negro de ceniza, los palmeros están quitando ese polvo de sus tejados y limpiando lo máximo posible sus instalaciones. Sin embargo, Carracedo detalla: "En una erupción no arde nada, por eso no podemos hablar de ceniza. Son fragmentos pequeños de lava solidificada por la atmósfera que se extienden gracias al viento".
Estos fragmentos de lava son llamados por los expertos como lapili. Juan Carlos explica a la audiencia: "Se utiliza en Canarias para múltiples facetas, mezclada con cemento se hacen bloques y son fundamentales para la construcción de casas, para paredes de las fincas, etc."
Por otro lado, lapili se utiliza para la "corrección de los suelos, haciendo el drenaje más fácil y más poroso". Además, Carracedo explica que "atrae mucho la humedad ambiental, donde hay una capa de lapili, aunque no haya llovido, si uno excarva ve que el suelo está húmedo, por lo tanto tiene una gran utilidad en agricultura".
En Lanzarote, en una erupción 1.730, que duró seis años, la isla quedó cubierta por lapili, "al principio parecía una desgracia, el picón parecía un infierno negro" pero, como cuenta el experto, "en la zona intermedia se dieron cuenta que la vegetación no había muerto, sino que crecía con más vigor, nació la agricultura enarenado que aunque son islas desérticas pues pueden cultivar vegetales atrayendo la humedad con lapili".