La declaración de una víctima del supuesto asesino de Érika, la niña de 14 años asesinada a cuchilladas en Oviedo, saca a la luz una segunda denuncia por acoso que no aparecía en la ficha judicial del acosador.
En su ficha judicial solo figura una detención que tuvo lugar en otro barrio de Oviedo y que se debe a la denuncia de varias jóvenes que aseguran estar hartas de sus agresiones verbales. Una denuncia que cuenta con una detención ante la que declaran varias jóvenes. Una de ella asegura que ya está harta, que todos los días se lo encuentra, que la insulta y que la persigue. Una denuncia que queda en delito leve por el que no entra en prisión ni se le condena a cárcel.
Había al menos otra denuncia, que no figura en su ficha policial y que se produce en 2019. La denunciante, que se ha puesto en contacto con el periodista Román García de La Nueva España, asegura que denunció a un hombre por “Acorralarme e intentar ponerme una bolsa en la cabeza”. Durante ese tiempo, varias chicas de Oviedo hablaban ante sí para avisarse de la presencia del supuesto acosador que parece peligroso, pero nadie hace nada.
No es hasta 2021 cuando se le detiene en Oviedo por una agresión verbal a otra chica en Oviedo. Quién no habría sido la única, pero si la única que se habría atrevido a denunciar. Un paso necesario para que se pueda comenzar un proceso judicial. La joven que denunció al supuesto asesino de Érika, acaba su escrito con estas palabras “Que impotencia, lo siento mucho, Érika, desde aquí te lloro y abrazo a todos aquellos que te conocen, y te querrán siempre. Lo siento mucho”.