El mal olor corporal suele estar directamente relacionado con la falta de higiene corporal, pero no siempre es así. La alimentación también puede influir en nuestro aroma y el olor corporal que transmitimos a los demás. Dime que comes y te diré a que hueles.
Verónica Dulanto con una experta nutricionista nos ha explicado por qué hay ciertas personas que huelen a amoníaco, pescado, sulfuros o incluso, tiene un aliento con olor a acetona debido a la alimentación que mantienen.
Las personas que tiene cierto olor a amoníaco seguramente mantengan una dieta muy rica en proteínas, tienen un consumo muy elevado de carnes y pueden sufrir algún tipo de problemas renales.
También existen humanos que sufren el síndrome del olor a pescado. Su nombre nos lo dice y tiene que ver con el consumo de pescado, y suele estar relacionado con grandes cantidades y un problema de metabolismo que no absorbe una determinada molécula.
Si la persona que tiene al lado huele a sulfuro, quizás el olor más común, seguro que ha comido ajo, cebolla, espárragos o brócoli. También es habitual que ese olor lo desprenda alguien que ha consumido especies como curry o ajo en polvo.
Un aliento a acetona está relacionado con la dieta Keto y las dietas muy bajas en azucares. Las personas tienen un olor de aliento a quitaesmaltes suele ser por su bajo consumo de azúcar.
Por el contrario, si queremos tener un buen olor corporal y de aliento, los expertos aconsejan un mayor consumo de piña, limón, espinacas, acelgas, productos que eliminan toxinas y que nos hacen desprender buen olor.