Si el otro día nos llevábamos un buen disgusto al saber que dormir la siesta aumenta en más de un 20% el riesgo de sufrir un derrame cerebral en esta ocasión, María Verdoy nos ha roto cualquier plan de comida playera que tuviéramos planeado. Adiós a las tortillas de patata, los filetes empanados y a un vinito fresquito bajo la sombrilla.
El aumento constante de los precios ha llevado a los españoles a bajar a la playa con la nevera y el bocata preparado. Un gesto que suele ser muy habitual en los meses de calor y también muy peligroso. Estamos acostumbrados a degustar platos típicos de nuestra gastronomía en playas y piscinas, pero puede ser un gesto muy peligroso para nuestra salud.
Si no queremos sufrir una intoxicación alimentaria o incluso, sufrir un cáncer de piel, es importante evitar cualquier tipo de alimento relacionado con los huevos bajo el sol. Aunque llevemos la comida perfectamente refrigerada, las neveras portátiles no son infalibles y degustar una tortilla de patata o un filete de pollo a más de 30 grados puede ser peligroso por una infección por salmonela o listeria.
En la lista de alimentos no recomendados para días de calor se encuentra la ensaladilla rusa debido a su salsa también procedente del huevo, los lácteos y el vino blanco tampoco, hay estudios que aseguran que beber vino blanco está relacionados con sufrir cáncer de piel.
Hay algunos alimentos que sí son una buena idea para almorzar al lado del mar. Paco Ballesta, desde la orilla de la playa en el Cabo de Gata (Almería), nos ha mostrado unos alimentos ricos y muy saludables para degustar un día de playa como son los berberechos, mejillones, atún, gazpacho y un poquito de piña.