Teresa Domínguez, periodista de Levante-EMV, comparece en el directo de ‘La mirada crítica’ para hablar del crimen del canónigo de Valencia. El clérigo habría tenido relaciones con un joven con discapacidad al que pagaba y con el que durmió dos noches antes de su muerte. Lo conoció en la estación de Valencia y le habría pagado el viaje en autobús para ir a su domicilio en la que mantenía relaciones sexuales.
El único detenido tenía tanto el teléfono móvil de la víctima como las tarjetas de crédito del canónigo con las que sacó dinero y pago en varios establecimientos. Estuvo al menos hasta la noche de ese domingo, pero este, asegura que el sacerdote se fue a la catedral y que le se fue con su exmujer y no volvió a verlo.
“Saben que el presunto asesino está acreditado por las pruebas de la policía, esta persona es de nacionalidad peruana y tenía consigo el móvil del sacerdote, además había utilizado sus tarjetas porque las cámaras le grababan en distintos establecimientos. El delito de estafa está comprobado con pruebas sólidas, pero las del homicidio aún faltan hay que esperar a la pruebas del ADN, de la policía científica y ver si hay huellas de este hombre en puntos determinantes pero es verdad que hay la existencia de la otra persona, que además dice mucho de cómo actuaba el clérigo cómo depravado sexual por muy sacerdote que fuese, en el caso del chico este es una persona que se le nota físicamente la importante discapacidad", detalla la periodista.
Sobre cómo se conocen el canónigo y el joven con el que supuestamente ha mantenido relaciones sexuales: "Inicialmente él merodea en la estación de bus y ve digamos a su objetivo, seis meses después le escribe y de primeras este chico no le responde porque no le tenía guardada en su agenda, los seis meses después pasan y este le felicita, le dice que venga a Valencia a verle, lo comenta con su exmujer, ella le dice que tenga cuidado y visto el empeño le paga el billete, el clérigo, a pesar de esto le manda dos giros postales de 20 euros y de 30 también. Cuando esta persona declara especifica que duerme dos noches en la cama del sacerdote y que no ocurre nada, la última noche del sábado a domingo el canónigo le sugiere tener relaciones y que sí que las mantienen, no se sabe en que consiste ese pequeño encuentro sexual", añade la periodista.
Además, la periodista comenta que "la noche del domingo al lunes es cuando sucedió pero es difícil establecer aún la hora de la muerte, los forenses están todavía a la espera de las pruebas que se están llevando a cabo en Barcelona así que la horquilla es muy amplia todavía, entre doce y veinticuatro horas".
Por último, Teresa Domínguez explica: "El ciudadano peruano que le roba el móvil y la tarjeta no reconoce los hechos ante el juez, él ha dicho que no es el autor, que él no lo ha matado, para la policía ahora mismo es complicado, si esta persona detenida puede probar lo que hizo hasta la noche del domingo y por alguna razón se determina que ese homicidio se determina que el homicidio se produce en las horas del mediodía en la noche esa, yo supongo que la policía tiene otras evidencias".