Yola Berrocal se convirtió en uno de los personajes más populares para el público de ‘Crónicas Marcianas’ a finales de los años 90 y principios de los 2000. La audiencia quería saber todo de ella y la actriz siempre se mostraba de lo más generosa con su público.
En sus numerosas intervenciones en el programa de Sardá la vimos bailar, actuar y hasta se atrevió a enseñar los rincones más íntimos de la casa en la que vivía con su familia. Fue en 1999 cuando la ahora participante de ‘La Casa Fuerte’ abrió las puertas de su hogar a un curioso Javier Cárdenas y mostró desde su piscina, hasta su estampada habitación.
“Te voy a enseñar las costumbres de un humano” fue la frase con la que Yola Berrocal se ofreció a mostrarle a Javier Cárdenas y a todos los espectadores de ‘Crónicas Marcianas’ los rincones de la impresionante casa en la que vivía.
Lo primero que hizo fue hacer un tour por el jardín de la vivienda. Enseñó su mesa de pin pon, la piscina donde hacía sus “larguitos” y el porche en el que disfrutaba cada mañana de su potente desayuno. Además, reveló una manía que tenía a la hora de hacer la comida más importante del día: utilizaba pajitas fantasía para beberse el zumo de naranja.
Pero Yola Berrocal no solo se quedó en el exterior aquel día. La cantante, actriz, modelo, presentadora y ganadora de realities también quiso mostrar el interior de la cálida casa en la que vivía con su familia; desde el amplio salón, los cuartos de baño, su lugar de lectura y hasta su habitación.
La artista explicó que le gustaban los estampados y la decoración de su habitación daba constancia de ello. Mientras que su cama era bastante sobria, toda cubierta con sábanas blancas impolutas, el sofá de su cuarto tenía un 'animal print' de cebra y las cortinas imitaban a la piel de los bovinos. "Me gusta mucho la vaca", dijo la actriz.
La actual concursante de ‘La Casa Fuerte’ no quiso que el equipo de ‘Crónicas Marcianas’ se fuera sin comer y les deleitó con una de sus especialidades culinarias: un huevo frito. Yola Berrocal dejó que el aceite cogiera la temperatura adecuada y abrió el huevo con la precisión del bisturí de un cirujano plástico, dejándolo caer en su sartén.
Yola impactó a todos con su espectacular casa en septiembre de 1999 y en ‘Unplugged’, veintiún años después, nada más y nada menos, hemos querido rescatar en vídeo aquel momentazo.