A Raquel Mosquera le costó mucho recuperarse de la muerte de Pedro Carrasco y tuvieron que pasar tres años para que la viuda del boxeador se viera con fuerzas para sentarse en un plató de televisión.
Para romper su silencio, eligió el programa ‘Salsa Rosa’, donde se sentó el 19 de junio de 2004 para hablar de cómo se sentía tres años después del fallecimiento de su marido. La entrevistada aseguró que se sentía “fuerte y más segura” y que había tardado tanto en volver a televisión porque necesitaba sentirse con fuerza.
Santi Acosta fue el encargado, junto con un grupo de colaboradores, de hacerle la entrevista en el mítico programa de Telecinco. Aquella noche, Raquel Mosquera habló de todos los temas; se sinceró sobre la depresión que había sufrido y, también, se pronunció sobre la herencia de su marido.
La viuda del boxeador narró la dura etapa a la que había tenido que enfrentarse tras perder a su marido y aseguró que su mayor apoyo habían sido sus padres y su hermano, Miguel. Fue este último quien le dio un toque de atención que le hizo salir de la depresión que atravesaba.
“Me dijo ‘si quieres, húndete, pero no es lo que le gustaría a Pedro”, explicó Raquel Mosquera. “Eso me llegó al corazón y a raíz de ahí me he esforzado por cuidarme y sacara todo adelante para estar bien”, confesó la que había compartido diez años de su vida junto al ex de Rocío Jurado.
Pasó una mala racha de depresión, pero Raquel Mosquera explicó que nunca se planteó tirar la toalla: “No quise quitarme la vida, pero es verdad que pasaba de todo. Todo me daba lo mismo (..) Ha sido a los dos años cuando yo me he empezado a sentir bien”, declaró en ‘Salsa Rosa’.
Un tema que también se abordó en la entrevista que concedió en 2004 fue la herencia que había dejado su marido: “Testamento no había. Al no haberlo, por ley, a su hija y a mí nos pertenecían algunas cosas”, afirmó.
“Yo en su momento no cogí abogado (..) Fue un amigo de Pedro y de Rocío Jurado quien nos llevó las cosas. Yo estaba de acuerdo y firmé (..) Firmé por pasar seis años en el piso de Paseo de la Habana, el cual he alquilado para poder pagar la hipoteca en la que me metí”.
A Raquel Mosquera le pertenecía una parte de esa vivienda y un terreno en El Escorial, del que no sabía nada. Que no luchara por esas tierras, hizo que los colaboradores le preguntaban el motivo por el que no peleaba por la parte que le correspondía.
“Yo no quería ningún tipo de problema. Lo que quería era no estar todo el rato recordando cosas y los documentos no iban a ayudar a eso”, explicó la viuda, que había decidido alquilar el piso en el que vivió durante años con Pedro Carrasco.
Aquella noche en ‘Salsa Rosa’ no fue la primera vez que Raquel Mosquera pisó un plató tras fallecer su marido, pero sí fue el día en el que decidió romper su silencio y poner palabras en televisión a todo lo que había sentido tras la dura pérdida.
Los colaboradores del programa de Santi Acosta le preguntaron si había conseguido rehacer su vida tras la muerte de Pedro Carrasco y ella aseguró que, como estaba empezando a levantar cabeza, sí que echaba de menos estar enamorada. Eso sí, aclaró que en ese momento no tenía novio.
La entrevista que Raquel Mosquera concedió aquella noche de junio de 2004 estuvo plagada de titulares, de emoción y, también, hubo lugar para las sorpresas. La ahora colaboradora de ‘Viva la vida’ recibió un bonito regalo del equipo de ‘Salsa Rosa’ que puso el broche final a una entrevista de lo más conmovedora.