Su padrastro mata a su madre y Loubna se convierte en su nueva víctima teniendo seis hijos con él

'TardeAR' ha comenzado el 'Expediente Marlasca' con una historia de un exlegionario que asesinó presuntamente a su mujer. Por si esto no fuera poco, el 'monstruo de Melilla', como así se le conoce, tuvo seis hijos con Loubna, la hijastra de su pareja asesinada. La Policía le detuvo después de descubrir un cuerpo enterrado en el garaje.

Loubna tenía 12 años cuando comenzó su calvario. Su padrastro le comentó que su madre había desaparecido. Pocos años después cuando ella tenía 17 años la dejó embarazada por primera vez. Durante la relación sus malos tratos fueron continuos hasta que un día el criminal intentó acabar con la vida de Loubna.

La víctima ha estado presente en 'TardeAR' y ha podido hablar con Ana Rosa sobre todo lo que ha vivido junto a su padrastro. Loubna ha señalado que en ningún momento pensó que le había hecho daño a su madre: "En un principio no porque me hizo creer que me había abandonado".

"Nos casamos en el 2007 porque no nos quedaba de otra, me decía que era para que el niño no se quedase desamparado", ha comentado la víctima del 'monstruo de Melilla'. Loubna ha explicado que los malos tratos de su padrastro comenzaron desde la infancia.

Sin embargo, la víctima ha mencionado que todo se agravó después: "Realmente empiezan cuando le digo que le voy a dejar". Tras esto, ha recordado el día en el que el presunto asesino intentó matarla: "El 18 de marzo de 2022. Esa mañana no pensé que estaría yo aquí".

Loubna ha recordado que aquel día le dio a entender que había asesinado a su madre: "Me dio por pensar que ya lo había hecho antes. Fue cuando empezó a golpearme, me hizo quitarme la ropa. Cuando luchaba con él me tiraba de la pierna. Me había roto el dedo de la mano, me tira al suelo y abrí la ventanilla para decir socorro".

La víctima ha comentado que pudo zafarse de él porque él tenía la pierna mal y no podía correr. "Las dos niñas fueron las que me salvaron esa mañana", ha explicado después. Después de hablar con la Policía, ellos llegaron a la conclusión de que había asesinado a su madre.

"Algunos de los hijos están de parte suya, dicen que yo me lo he ganado. Para ellos su padre es sagrado", ha señalado con tristeza. Por último, ha manifestado que desde el Ministerio de Igualdad no ha recibido ninguna ayuda: "En mi casa no se me ha ayudado en nada".