Inocente Díez fue el primer entrenador de Lamine Yamal, le conoció con poco más de tres años y ya vio lo que tenía. Tras el triunfo de La Roja en la Eurocopa, nos visita en 'TardeAR' y nos cuenta cómo fueron sus primeros pasos en el campo y cómo llegó al FC Barcelona.
Es el coordinador de La Torreta, el lugar al que llegó Lamine cuando aún no había cumplido los cuatro años: "Era muy pequeño, tenía mucha ilusión, le invitamos a entrar y nos sorprendió el primer día", confesaba
Y es que tuvieron claro que ya entonces era "diferente" a los demás: "Solamente con caminar era muy diferente". Y es que a esa edad, los niños se distraen con cualquier cosa, pero esto no le pasó a Lamine: "Él nunca salió del campo".
Así, Inocente fue el primero en dar consejos futbolísticos al jugador, que estuvo con ellos durante tres temporadas. Es más, nos contaba cómo llegó al FC Barcelona: "Se lo ofrecimos nosotros al Barça. Los ojeadores están por ahí pero a los campos pequeños..." Eso sí, nos confesaba que hizo la prueba primero para el Espanyol: "Hubo algunas cosas que no, no lo vio".
A día de hoy aún mantienen el contacto. Le felicitó por su cumpleaños, también por la copa y ha hablado con su madre recientemente: "Estando ya aquí dice que un trocito es de La Torreta".
Abdul es el tío de Lamine Yamal. Nos confesaba que lleva ya dos días sin dormir y lo decía portando orgulloso la camiseta con el nombre de su sobrino. Estaba en la terminal 1 de aeropuerto de Barajas tras llegar en el avión en el que han viajado todos los familiares y bromeaban contando que le dijo a Lamine que no volaría a menos que llegaran a la final.
Ahora, nos cuenta que el jugador está "muy feliz", no ha pegado ojo y nos contaba: "Así tiene que ser, es muy bueno".
Otro de los jugadores, Cucurella, ha protagonizado un vídeo que se ha hecho viral. Y es que los aficionados del Chelsea le hicieron un cántico que se ha convertido en un himno y que él mismo ganó tras el triunfo de La Roja.
“Cucu Cucurella, se come una paella. Cucu Cucurella, se bebe una estrella. Haaland tiembla, ¡que viene Cucurella¡. Haaland tiembla, ¡toma una galleta!”, cantaba el jugador y Boris Izaguirre, tras escucharle, decía tener nuevo ídolo.
"¡Es una estrella, es una estrella!", gritaba el colaborador de 'TardeAR', alababa su "personalidad tan definitiva" y es que cree que tiene "una estética de jugador de los 70" y que transmite el mismo mensaje: "¡Te amo Cucurella, te amo!", gritaba Boris, que hacía toda una declaración: "Eres mi nuevo tipo de varón para siempre, Cucu Cucurella eres una estrella".