Continúa la búsqueda de parte del cuerpo de Joan Pere, desaparecido en Badalona: solo se han encontrado la cabeza y el posible torso, en ubicaciones distintas

Joan Pere, un vecino de Vic de 44 años, lleva desaparecido desde el 24 de enero en Badalona. Hace escasos días que se encontró una cabeza humana en la misma localidad y se confirmó que pertenecía a Joan. Las autoridades también han localizado un torso en el centro de Barcelona, que apunta a ser también del desaparecido, mientras que los Mossos continúan la búsqueda del resto de las extremidades.

Originario de Vic, Joan Pere desapareció el 24 de enero en Badalona. Mes y medio más tarde, el 15 de marzo, se localizó una cabeza humana en Barcelona y los análisis confirmaron que pertenecía a Joan.

Horas más tarde, un Mosso d’Esquadra, fuera de servicio y que paseaba con su perro en el barrio de Gracia, descubrió una bolsa de basura que contenía un cadáver con claros signos de violencia y sin extremidades ni cabeza. Los investigadores continúan con las pruebas de ADN, pero todo apuntaría a que se trata de Joan.

Aparte de la brutalidad del crimen, llama la atención que las partes del cuerpo han sido localizadas a 15 kilómetros de distancia: la cabeza fue encontrada en Font de l’Amigó, en Badalona; el torso, en Carrer de Ca l’Alegre de Dalt 96, en Barcelona.

El cuerpo llevaría mas de un mes en esa bolsa, pero nadie se había percatado de su presencia. El equipo de ‘TardeAR’ habla con vecinos del barrio de Gracia, que confirman que no vieron ni olieron nada.

También es llamativo el testigo clave: Óscar es la última persona que supuestamente vio a Joan con vida, pero ha cambiado muchas veces de versión y en su casa han aparecido varias pintadas en las que se puede leer “asesino”.

Algunas personas del entorno de Óscar aseguran que “no es de fiar” y hacen referencia a que es habitual verle “de borrachera”. Óscar también agredió a una reportera de 'TardeAR' cuando realizaba su trabajo, hace escasos días.

Sobre el entorno de Joan Pere son varios los entrevistados que apuntan que tenía malas compañías, pero que quería cambiar de vida.

Por el momento, la principal incógnita para los Mossos es descubrir quién ha escondido las partes del cuerpo en distintos sitios, cuál es la escena del crimen y dónde está el resto del cadáver, pues lo consideran un hallazgo clave para descubrir quién acabó con la vida de Joan.