Ana Obregón, radiante, ha bautizado a Ana Sandra. Una ceremonia muy emotiva en el que la pequeña Anita visitó el mismo traje que llevó el hijo de la actriz, Aless, en su bautizo. Sin embargo, se ha producido una sonada ausencia, la de Alessandro Lequio, a quien la actriz dirigió un llamamiento desde el plató de 'TardeAR'.
Su madrina ha sido Celia, sobrina de Ana y, además de prima, amiga y confidente de Aless Lequio. En cuanto al padrino, hubo diversos cambios y finalmente fue un amigo de la infancia de Aless, Giacomo Uracilli.
Alessandro Lequio no acudió al evento y él mismo ha explicado en 'Vamos a ver' que es algo que no va con él. Sí explicaba ante las preguntas de sus compañeros que Ana le invitó a través de un mensaje pero que él no respondió a esta invitación: "Es simplemente no contestar, no va con segundas".
"Yo, con todo el respeto al programa y a la madre de mi hijo, nunca he dicho nada ni diré nada que tenga que ver con mi hijo", decía el colaborador. Eso sí, dejaba claro que entre ellos existe "el máximo respeto" a pesar de que sus posturas son diametralmente opuestas.
Hace algunas semanas, Ana Obregón se sentaba en el plató de 'TardeAR' y abordaba la ausencia del padre de su hijo desde que naciera Ana Sandra. Tras su entrevista Ana Rosa Quintana le deseaba que la niña se críe maravillosamente bien y también que arreglara la situación con Alessandro, algo ante lo que la actriz asentía.
Buscando su cámara, Ana Obregón enviaba un mensaje a Lequio: “Esto es muy fácil, la casa está abierta, la puerta está abierta Alessandro”. Es más, contaba que habla a Ana Sandra de su abuelo: “La niña tiene muchas ganas de verte, le he enseñado fotos tuyas y sonríe, es la hija de tu hijo”.
“Creo que Aless sería muy feliz si pudieras abrazarla, estoy deseando que Anita conozca a tu hija y a María, que os adoro a los dos, y me encantaría que vinierais a casa porque creo que Aless se lo merece”, concluía.
“Me gusta mucho que hayas nombrado a María, solo hace falta una y llamada y yo que eres muy inteligente sabes cuál es”, respondía Ana Rosa.