Las semanas de concurso, y por tanto sin comer, empiezan a pasarle factura a los supervivientes. Albert Barranco sufrió un mareo que preocupó a todos sus compañeros en la isla.
Se encontraba recogiendo cangrejos y lapas cuando notó que las fuerzas le flaqueaban. Pensó que en seguida se repondría pero lo cierto es que cada vez se encontraba peor.
Ferre rápidamente se puso a echarle agua por la caray a sostenerle. Barranco tuvo que tumbarse para intentar recuperarse.
En el otro lado de la playa, el resto de compañeros miraban atentos la situación. En especial Rocío Flores, que se preocupaba mucho por su nuevo amigo.
Barranco tuvo que ser atendido por el médico del programa y, afortunadamente, solo se trató de un susto.