La periodista Pilar Vidal ha publicado en 'ABC' nuevos datos sobre los ocho años de relación de Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler y los motivos de su ruptura.
Vidal cuenta en la publicación que, pese a que la ruptura no se ha hecho efectiva hasta hace unas semanas, lo cierto es que la pareja atravesaba por momentos complicados desde hacía tiempo: "Isabel intentó dejarle hace dos años, pero al final no lo hizo porque le daba pena por su avanzada edad".
Al parecer, las numerosas manías del escritor terminaron por hartar a la socialité, y es que Llosa pediría a Isabel que le arropase cada noche dándole antes "un beso de buenas noches".
El escritor también tendría entre sus costumbres diarias que Isabel le preparase un zumo de papaya natural: "Ella estaba muy preocupada por su salud, tenía miedo de que se atragantase con algún hueso y por eso en su cocina no había nada con semilla, ahora las aceitunas han vuelto a los estantes".