Los concursantes de 'Secret Story' se encuentran hambrientos. Tras perder dos pruebas semanales consecutivas, los habitantes de 'La casa de los secretos' se encuentran sin provisiones y lo están pasando realmente mal. El programa se ha apiadado de los concursantes y les ha propuesto un trato: una mesa repleta de comida si conseguían no reaccionar ante una serie de estímulos externos.
La primera en ponerse a prueba ha sido Cristina Porta. La reportera ha entrado en El Cubo y se ha encontrado con su macota, Milton. La ha enloquecido y no ha podido resistirse a abrazar a su perrito. "¡Hola mi niño. Hola Milton cariño!", ha gritado. Cristina no ha dejado de jugar con su mascota, perdiendo la oportunidad de disfrutar de un estupendo banquete. "Lo siento, ni jamón ni nada, no puedo", se ha disculpado.
Tras las nominaciones, ha sido Julen el que ha recibido la visita de su amigo canino. "Hay otro perro", ha avisado Cristina. Al girarse y reconocer a su macota, Julen tampoco ha evitado la tentación de correr tras su Carlino. "¡Puchi!, ha gritado recorriendo el salón.
Sandra ha recibido como estímulo a su ex, Tom Brusse. Ella ha aguantado sin hablarle, sin embargo, Julen ha saludado al francés nada más verlo. Los tres han salido al jardín, y lo que ha comenzado como una conversación agradable, se ha tornado en un tenso enfrentamiento.