La noticia de la supuesta separación Sara Carbonero e Iker CasillasIker Casillas se confirma y se desmiente. Sin embargo, según ha apuntado Kiko Matamoros en 'Sálvame', existirían unos “audios” en los que el propio futbolista asumiría esta situación y nos da más detalles: “Él se culpabiliza de la mala relación y de la crisis profunda que tenía en ese momento con su mujer”.
No sabe en qué momento se grabaron, pero sí apuntaba que Casillas hace alusiones a “comportamientos personales de él mismo”. No habla de separación oficial, pero sí de que la relación está “rota” y es “por su culpa”.
Al parecer, este audio acaba por convertirse en una “confesión durísima” que va más allá de no haber estado a la altura y el colaborador no quiere que trascienda: “Tiene que pertenecer a la más absoluta intimidad de una persona y no voy a entrar más”.
La entrevista que Iker Casillas concedió a Gustavo González hace más de un año dio mucho que hablar ya que el futbolista confesaba que quizá no había estado junto a Sara todo lo que hubiera debido estar. Sin embargo, había más cosas que entonces no trascendieron y que ahora, a la vista de los rumores de separación, desvela: “La relación está rota hace más de un año pero han encontrado el equilibrio para soportarse y el respeto ha sustituido al amor". Es más, recordaba que Iker no acudió la entierro del abuelo de la periodista: “No fue porque la relación estaba rota hacía mucho tiempo”.
De hecho, narra que aún viviendo en Oporto, la separación era ya un hecho: “Cada uno vivía en una planta de la casa (…) Yo hablé con Iker de divorcio y separación, hace más de un año estuvieron a punto de emitir un comunicado hablando de la separación”.
No lo hicieron por las circunstancias pero según González, la crisis viene de más atrás: “Se rompe hace dos años, superaron como camaradas juntos la adversidad y decidieron estar en lo bueno y en lo malo, en la salud y en la enfermedad”.
“Va a seguir con Sara pero de esta manera, haciendo vidas separadas”, concluía el colaborador de ‘Sálvame’.
Además, el colaborador nos apuntaba algo que también habría supuesto un obstáculo en la relación de la pareja en algunas ocasiones y es que destaca de Iker “su falta de generosidad con el prójimo y consigo mismo”.
“Se maneja por debajo de los parámetros normales”, añadía y asentía cuando el preguntaba si es tacaño: “Absoluto. Es conocido y reconocido entre la gente que le trata y le quiere como una de sus principales características”.