María Teresa Campos no gana para disgustos. Tras unos meses complicados con Edmundo Arrocet en pleno foco mediático contando intimidades de su relación, ahora la presentadora se enfrenta a un nuevo quebradero de cabeza.
La periodista de ochenta años tiene que dejar la casa en la que ha vivido durante décadas tras conseguir venderla después de varias negociaciones. Sin embargo, María Teresa aún no puede descansar a gusto porque sigue sin encontrar un nuevo hogar.
La periodista se mostraba feliz hace tan solo unas semanas porque había encontrado un piso que alquilar en la misma urbanización en la que vive su hija mayor, Terelu Campos. Sin embargo, y pese a tener los trámites prácticamente finalizados, la operación se ha venido abajo: "El propietario de la casa se ha echado para atrás porque los vecinos de la urbanización no la quieren allí".
Tal y como han explicado los colaboradores de 'Sálvame', los vecinos del edificio habrían pedido al propietario de la vivienda que la periodista no se trasladase allí a vivir: "Bastante tienen con una Campos viviendo allí y soportando a la prensa en la puerta".