En su esperadísima y polémica entrevista Kiko Rivera ha perdonado a su madre. Tras meses criticando a la cantante en los platós de televisión y en redes sociales, después de su reencuentro en Cantora el DJ habría decidido perdonar por completo a su madre.
Tal y como él mismo ha confesado en la publicación, Kiko habría tomado la determinación de perdonarle a su madre los cinco millones de euros que le debería: "No necesito ni cinco millones ni dos, es mi madre y tiene problemas económicos, ¿qué puedo hacer? No quiero que se vaya detrás de mi abuela".
Sin embargo, este programa ha tenido acceso a un documento que demostraría que Kiko no es tan altruista y generoso como quiere hacer creer y es que, según el papel, Isabel Pantoja habría tenido derecho a gestionar libremente la herencia de su hijo: "Según este documento Kiko no le ha perdonado a su madre nada, ella podía hacer lo que quisiese de forma legal".
Los colaboradores de 'Sálvame' aseguran que días antes de la muerte de Doña Ana, Agustín Pantoja mediante su abogado se hizo con el documento para guardar sus espaldas y las de su hermana. Según esta información, Kiko no habría tenido más remedio que renunciar a lo que él creía era suyo, muy lejos de la actitud victimista que ha intentado mostrar en su reciente entrevista.
La bogada Montse Suárez ha analizado los documentos de la herencia de la discordia y ha sacado conclusiones realmente sorprendentes. Montse asegura que Kiko firmó en 2015 un "poder de ruina" mediante el cual el tío Agustín e Isabel Pantoja podían hacer y deshacer a su antojo con la herencia de Kiko: "Aunque sea un poder legal lo cierto es que Isabel tendría que haber dado cuenta a su hijo".
Montse sin embargo apunta que, aunque Kiko firmó el poder de ruina, este documento no se puede firmar en cualquier situación (recordemos que Kiko reconoció que consumía sustancias en aquel momento) y la persona a la que se le otorga el poder (en este caso Agustín Pantoja) no puede utilizar los bienes e intereses del que cede el poder para su enriquecimiento.
Teniendo en cuenta todos estos puntos, el fiscal de Chiclana podría seguir con el caso actuando como denunciante pese a que Kiko Rivera haya decidido retirar la demanda: "Debemos recordar que hablamos de cárcel, la pena si se sigue adelante y se demuestra delito puede ser de cárcel".