Ayer, Anabel rechazó la sesión de coaching que le ofreció el programa porque tenía "una comida con cuatro amigas de Sevilla" que venían a verla y con las que iba a hacer su propia sesión de coach. Sin embargo, sabiendo que este viernes se decide qué va a ocurrir con estos dos colaboradores, Anabel sí ha querido tener esa conversación con Cristina Soria.
En esa charla, la coach le ha explicado a Anabel que podría haber dicho lo mucho que necesitaba ver a sus amigas de una forma mucho más amable y así lo ha hecho: "Mis amigas venían ayer de Sevilla, hoy no las podía ver ni mañana tampoco porque trabajo y ya tenían el billete sacado para venir a comer conmigo. Se van el viernes", ha dichoi, aunque este argumento no ha convencido nada a Kiko Hernández, que cree que lo primero es cumplir con el programa.
Igual que hizo con Rafa Mora, Cristina Soria ha querido quitarle las "caretas" a Anabel, que ha terminado llorando al hablar de lo lejos que está de sus primos, KiKo Rivera e Isa Pantoja, a los que considera como unos hermanos y a quien ve mucho menos desde que se fue a vivir a Canarias. También se ha defendido del comentario de las "croquetas" y a las azafatas del Deluxe que ha hecho Rafa Mora sobre ella.