Kiko Hernández aseguró en 'Sálvame' que las Campos tienen un "topo" en la familia. El colaborador afirmó que hay una persona que tiene mil horas de grabaciones de María Teresa, Terelu, Carmen Borrego o Alejandra Rubio...Y nos daba un nombre: Gustavo, chófer, hombre de confianza y casi un hijo para la presentadora. 24 horas después, Terelu Campos reaccionaba en 'Sálvame: se posiciona junto a Gustavo y exige pruebas que le hagan cambiar de opinión.
Carmen Borrego decía desconocer la información pero aseguraba que, de confirmarse, sería "el peor puñal" que podrían clavarle a su madre. Se decía que Terelu Campos era consciente de esta información pero ¿Qué opina? La presentadora responde en 'Sálvame'.
24 horas después, Terelu Campos se mojaba y es que no le valen dimes y diretes, solo quiere “pruebas” de que lo que se están diciendo es verdad: “No sé quién, fuera o cerca de nuestro entorno, pretende ejercer esta campaña contra Gustavo”.
La presentadora se posicionaba así del lado de la persona a quien considera su hermano y expresaba que lo que más le preocupa es que, en este juego, les utilicen como a “peones” no sabe con qué objetivo.
Terelu extendía esta opinión a toda su familia: “No hay ninguna duda sobre Gustavo”. Por ello, solo si alguien le presenta algo que no sea un mensaje de un enfado, cosa que apunta pasa en todas las familias, creerán lo contrario.
“Ya está bien”, pedía la presentadora, pero sí hacía una petición a Gustavo, que llamó “sinvergüenza” a su hermana: “Yo no lo hubiera hecho, yo también hubiera llamado a la persona con la que he tenido confidencias, Kiko Hernández”.
“Pido que esto se pare, entre otras cosas, porque a la única que se le puede hacer daño es a la persona que está en un momento muy vulnerable”, decía la presentadora. Y es que cree que el hecho de que Gustavo esté mal, dolido o sienta impotencia son sentimientos “muy difíciles de digerir” que pueden afectarle..
Según Terelu, Gustavo “ha sufrido mucho” para proteger a María Teresa y verse participando “de algo que le parecía vergonzoso que nos lo hemos comido con patatas por el bien de mi madre”. Para ella, esta es “la mayor prueba” de su lealtad con lo que solo pruebas que vean sus ojos y escuchen sus oídos le harán cambiar de opinión.