Rocío Carrasco relató en el episodio ocho de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' el que ha sido uno de los sucesos más traumáticos que ha vivido: la agresión de su hija, Rocío Flores. Con un testimonio que helaba la sangre, la hija de Rocío Jurado recordó con detalle cómo fue el último día que vio a su primogénita.
"Empezó a pegarme, pero mientras me pega va gritando, gritando ‘¡no me pegues!’ ‘¡no me pegues!’ y yo la miraba ahí y era ella la que me estaba pegando a mí", desveló rememorando el día en el que cogió miedo a Rocío Flores.
En una nueva entrega de su docuserie, ahora hemos podido saber cómo se sintió Rocío Carrasco después de contar este terrorífico episodio de su vida. En unas imágenes inéditas sobre el capítulo, se sinceró sobre sus sentimientos acerca de su confesión.
"¿Te sientes mejor?", le preguntaron. "No te voy a mentir. Hoy no me siento mejor. Sé que me sentiré mejor. Hoy tengo la sensación de que he soltado un lastre muy importante para mí en mi vida, muy desagradable y traumático", decía.
"Para mí estar mejor no es la palabra. Estoy más aliviada. Sé puede decir más aliviada. Mejor espero y deseo estar más adelante", añadió después esperanzada.
En su entrevista, Rocío Carrasco explicó que aún no se siente preparada para retomar el contacto con Rocío Flores. Pero en el episodio nueve, además, confesaba que piensa que su hija no se arrepiente de lo que hizo.
Viendo unas imágenes en las que Antonio David Flores decía en un plató de televisión que su hija no se arrepentía de nada, ella coincidió. Pero le señaló a él como el máximo responsable: "Eso es un problema de su hija, que es la mía, y que no sienta responsabilidad y no tenga nada de lo que arrepentirse es culpa de ese, de lo que le ha implementado, de lo que le ha mutilado", sentenció.