Rocío Carrasco no ha mencionado a su familia desde que empezara a narrar la mala relación con su hija y la agresión que finalmente sucedió. Pero ¿Por qué? ¿Qué le separa de ellos? Rocío lo ha desvelado en el nuevo episodio de su serie documental: le contó a alguien lo que había pasado y luego le acusó de derramar lágrimas de cocodrilo.
A lo largo de su relato, Rocío Carrasco no ha hecho alusión ni a su familia ni a la de Antonio David Flores y ella asentía. Sabe que su familia ha tenido contacto con ellos “mucho después” de que ocurriera todo y tiene claro por qué: “Lo que han hecho ha sido apostar por lo que ellos pensaban que era el caballo ganador”.
Por eso, cree que también son “cómplices en cierta forma” porque sabían “la verdad”. Y es que aunque no habló con todos, sí contó lo sucedido a una persona, al marido de su tía Gloria, José Antonio, que luego la acusó de derramar lágrimas de cocodrilo: “Se lo conté y luego salió en televisión jactándose”.
El programa ha recuperado estas declaraciones en las que José Antonio apuntaba que las lágrimas de su sobrina “le ablandaron” pero que con el tiempo se había dado cuenta de que no eran reales.
Así, felicitaba a su hija por el “padre diez” que tiene y le daba las gracias a su mujer, Olga Moreno: “Los sentimientos que Rocío percibe de ella es algo muy importante”.
Rocío Carrasco prefiere no recordar su última conversación con José Ortega Cano. Asegura que no se ha preocupado por ella, mientras ella sí lo ha hecho en momentos tan difíciles como cuando fue ingresado. Además, ha confesado que tienen alguna "cuenta pendiente".