Después de 7 inolvidables episodios, en los que Rocío Carrasco ha decidido romper 25 años de silencio para contar cómo vivió su matrimonio y separación de Antonio David Flores, ha llegado el momento en el que la hija de Rocío Jurado vuelva a pisar un plató de televisión. Por eso, la semana que viene estará en el plató de Mediaset, al lado de Carlota Corredera.
En este séptimo episodio, Rocío aporta documentos sobre el convenio que firmó en el año 2003 con Antonio David Flores en el que, después de que él fuera de plató en plató diciendo que no veía suficientemente a sus hijos, Rocío Carrasco, que tenía la patria potestad de los dos menores, tomó la decisión de “dejárselos más tiempo” a Antonio David, creyendo que así se acabarían sus quejas en la televisión.
En ese convenio, donde acordaban que sus hijos pasarían 15 minutos con cada uno, los dos firmaron una cláusula de confidencialidad pero, a los tres días de esta firma, sale un artículo firmado por Lydia Lozano en el que se cuenta todo lo que no se tenía que contar.
Además, Antonio David salió después en un programa aseguró que había renunciado a parte de su dinero propio por recibir este "trato de favor" en la custodia, cosa que hoy Rocío ha desmentido rotundamente.