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Rebeca Pous sorprende a los concursantes con su llegada a Guadalix: "Se queda en la casa con vosotros"

La gran sorpresa de la noche en 'GH DÚO' para los concursantes era que Rebeca Pous entraba en la casa de Guadalix y lo ha hecho para quedarse durante unos días con ellos, para ayudarles con la prueba semanal y convivir con ellos, en medio de la ruptura total entre los dos bandos.

La leyenda de la música llega Guadalix para ayudar a los concursantes con la prueba semanal. "Bienvenidos al templo de la música noventera y la diversión, la discoteca de 'GH DÚO'. Esta semana, os enfrentáis a la clásica prueba de baile y tenéis que darlo todo para clavar los pasos de la coreo que acabáis de ver", les explicaba Ion Aramendi, que les desvelaba algo con Rebeca Pous ya frente a ellos: "Vais a tener ayuda, la cantante del écito planetario 'Duro de pelar' os va a ayudar a superarla porque se queda en la casa con vosotros".

"Recodad que bailar no es solo memorizar movimientos, también es una cuestión de actitud y, de eso, Rebeca sabe un montón, hacedle caso en todo porque os jugáis superar la prueba", decía el presentador. Momento en el que Rebeca saludaba a los concursantes, que le enseñaban la casa.

Miguel Frigenti y Álex Ghita, los primeros en descubrir a la cantante en la casa

Poco a poco, durante la gala de 'Límite 48 horas' dos voluntarios iban a saber que Rebeca estaba en la casa. El primero era Miguel Frigenti que se alegraba mucho de ver a la cantante: "Qué fuerte, qué bien". "Es al único que conozco", decía ella.

Miguel, al ofrecerse como voluntario de entrar al confesionario había ganado un privilegio, pero primero iba a tener que cumplir una misión que le explicaba Ion Aramendi: "Vas a tener 90 segundos, tendrás que decirle a un compañero esta frase: 'Tú siempre fuíste duro de pelar'. Es muy importante que no le cuentes a nadie de esta misión". Misión que el concursante cumplía con éxito.

Pero no iba a ser el único en encontrarse con Rebeca antes de que el resto supieran que estaba en la casa. Álex Ghita era el siguiente en postularse como voluntario y dentro del confesionario se encontraba con la cantante, a la que no reconocía: "Eres cantante, ¿no? Seguramente será una artistaza, pero yo no estoy muy allá". "Te garantizo que te conoce y que ha bailado muchas de tus canciones", decía Ion Aramendi y Rebeca no dudaba en cantar al entrenador personal: "Tampoco me tiene que conocer todo el mundo, no pasa nada".

Álex también iba a poder ganar un privilegio con otra misión. "Tienes 90 segundos para ir al cuarto de baño, soltarte el pelo, pintarte la cara de una manera exagerada y cambiar completamente de 'look'. Tiene que ser algo que llame la atención y que deje con la boca abierta con tus compañeros. Tienes que volver al salón y hacer como que lo que has hecho es algo normal", le explicaba el presentador y este no dudaba en hacerlo.