Verdeliss ha dado a luz a su octava hija. Después de nueve meses cargados de incertidumbre y miedos, la que fuera concursante de 'Gran Hermano VIP' ya tiene entre sus brazos a Deva, que ha llegado al mundo en un parto velado para llenar de felicidad la vida de sus padres y de sus siete hermanos.
"Y cayó el sol y apareció ella. Mi Deva, mi luna. Nueve meses atrás te pedí a la luna, así te llamas y ella te trajo. Y nació enmantillada, danzando en su líquido amniótico, nunca llegó a romper la bolsa. Un fenómeno así sucede en un parto de cada 80.000, demostrando sanar la herida pasada", ha comenzado escribiendo la influencer, que dio a luz el pasado martes, 8 de febrero, a las 18:47 horas en un parto velado, un nacimiento que ocurre en contadas ocasiones.
Se trata de un alumbramiento en el que la bolsa amniótica permanece íntegra o intacta y el bebé nace sumergido en el líquido amniótico, envuelto en la bolsa a modo de 'velo'. De ahí, el nombre. Un parto diferente que, según algunas culturas y creencias populares, es un símbolo de buena suerte y podría llegar a tener ciertas propiedades mágicas.
Una simbología de lo más especial para Verdeliss, que siempre había creído que había algo mágico en este embarazo. "Llegó un 8 de febrero, fundiéndose con mi intuición y regalándome en su idioma ese vínculo que siempre nos unirá", ha escrito la de Pamplona junto a una preciosa fotografía en la que aparece haciendo el piel con piel con la pequeña Deva.
Un parto que, en palabras de la propia Verdeliss, ha sido "precioso, perfecto y soñado". "Hay seres humanos que llegan a este mundo con una misión y tú, pequeña mía, eres especial", ha continuado escribiendo en esta carta de agradecimiento y de bienvenida a su hija, el "octavo amor de su vida", que ha llegado al mundo tras nueve meses de gestación. Todo un reto y un sueño cumplido para Verdeliss.
Tras el parto prematuro de la pequeña Miren, este embarazo ha supuesto para la de Pamplona una auténtica montaña rusa de emociones. Cada semana que pasaba era para ella como alcanzar una nueva meta, un nuevo logro personal. Día tras día, Verdeliss ha superado todos sus miedos gracias a la pequeña Deva, que ha se ha convertido en su embarazo más largo de los últimos seis años.
Y es que, además de Miren, las mellizas Eider y Ane también adelantaron su nacimiento a la semana 36+2. "Me siento en paz y tranquila para recibirte. Perdóname, Deva, por todas las veces que dudé de nuestra capacidad. Somos únicas, maravillosas y poderosas", escribía la influencer hace apenas unos días en su último posado con su barriga de embarazada.
Con el nacimiento de Deva, la que fuera concursante de 'GH VIP' se ha quitado esa espinita clavada que suponía para ella una piedra en el camino que la hacía avanzar a duras penas. Ahora, con su familia al completo tras la llegada de su octava hija, la de Pamplona respira tranquila y más feliz que nunca al haber visto por primera vez la carita de su niña.
A pesar de que estos nueve meses no han sido todo lo idílicos que a la exconcursante de 'Gran Hermano VIP' le habría gustado, este embarazo ha terminado convirtiéndose en algo mágico para ella. Es por eso que Verdeliss ha decidido llamar a su pequeña por el nombre de Deva. Aunque de primeras puede resultar algo inusual, para ella guarda un significado muy especial que, hasta la fecha, no ha querido desvelar.
Este nombre, que se refiere a la diosa hindú de la luna, tiene cierto misticismo a través de su conexión con los astros y, en especial, con la luna. "La luna siempre será nuestra aliada", escribía Verdeliss hace unos meses, cuando desvelaba el nombre de su pequeña, que ha llegado al mundo para cambiar de manera radical la vida de su mamá.
Pero no solo han sido Verdeliss y su marido, Aritz Seminario, los que han estado esperando con ansias la llegada al mundo de su bebé, también sus hermanos. Aimar, Irati, Laila, Julen, Eider, Ane y hasta la pequeña Miren han estado contando los días para conocer a su hermanita pequeña, a la que cuidarán con mucho mimo, tal y como han hecho con Miren, que ya ha dado su gran paso de convertirse en hermana mayor.
Eso sí, la llegada de la pequeña de la casa tiene a Verdeliss algo nerviosa por los posibles celos de Miren que, hasta hoy, siempre había sido la pequeña y la más mimada de sus hermanos, que han estado siempre volcados con ella desde el primer minuto. "Temo un poco por Miren, con ella las cosas han sido muy distintas", reconocía hace unos meses la mamá de ocho hijos.
"Tras su fragilidad el nacimiento prematuro, nos volcamos con ella de forma muy consentidora y la tenemos en palmitas. El mote de 'jefa' no lo otorgamos por casualidad, tiene más atenciones que ninguno", señalaba en tono de humor la que fuera concursante de la sexta edición de 'GH VIP'.
Pese a todo, Miren lo único que ha hecho hasta ahora ha sido mostrar un profundo amor por su futura hermanita. Es más, a pesar de sus dificultades para hablar y comunicarse con normalidad (debido, precisamente, a su prematuridad), una de las primeras palabras que aprendió la peque fue "bebé". Es más, en estos nueve meses no ha hecho otra cosa que acariciar la barriguita de su mamá y tratar de comunicarse con Deva, que por fin ha llegado al mundo para convertirse en la revolución de la familia Verdeliss.