‘Los Serrano’ marcó un antes y un después en toda una generación, que, semana tras semana, encendía el televisor para no perderse las aventuras de la original y divertida familia capitaneada por Diego (Antonio Resines) y Lucía (Belén Rueda). A pesar de que concluyó hace casi dos décadas, con un final que dejó un sabor agridulce entre los seguidores, la vida de los miembros del clan, como es el caso de Víctor Elías, continúa levantado pasiones, sobre todo cuando algunos de ellos se reencuentran. Pues bien, el recordado 'Guille' es teclista de conocidos artistas y ha sufrido un verdadero cambio de imagen.
Hace apenas unos días, los nombres de dos de los personajes más queridos de la ficción, Guille y Teté, interpretados por Elías y Natalia Sánchez, volvían a acaparar titulares y se viralizaban rápidamente en la Red. ¿El motivo? Un encuentro fortuito en un vagón de tren que hizo vibrar a los más incondicionales de la serie, que, en más de una ocasión, fantasearon con ese final.
En la entrañable imagen, Natalia coge a Lía mientras que Víctor se encarga de sujetar a su hijo Neo, el pequeño que llegó al mundo el pasado mes de mayo. La actriz madrileña está actualmente volcada en la bonita familia que ha formado junto al también actor Marc Clotet, algo que no duda en compartir con sus ‘followers’ a través de las redes sociales. Pero, ¿qué ha sido del que fuera su hermanastro rebelde en la exitosa ficción de Telecinco? Os lo contamos...
Era tan solo un crío cuando se convirtió en una estrella al meterse en la piel del hijo mediano de Diego Serrano. Pero, con el paso de los años, Víctor Elías decidió cambiar el rumbo y centrarse en su verdadera pasión, la música, una afición que le viene desde bien pequeño gracias a su padre.
Aunque durante su aventura en ‘Los Serrano’ participó en la banda Santa Justa Klan, con el inolvidable hit ‘A toda mecha’, el gran salto musical del madrileño llegó más tarde. El intérprete se formó, especializándose en piano, y comenzó a trabajar en diferentes musicales como ‘The Hole’, ‘La Llamada’ o ‘Cuando menos te lo esperes’, la obra protagonizada por Edu Soto en la que Víctor se encargó de la dirección musical.
Aunque empezó tocando la batería de pequeño, regalo que le hizo su padre con tan solo seis años, la pasión del músico es el teclado. Al lado de este instrumento, Víctor Elías ha recorrido la península junto a grandes estrellas del momento, como Nora Norman, Sofía Ellar, Dani Fernández o Taburete, la popular banda madrileña encabeza por Willy Bárcenas, hijo del extesorero del Partido Popular.
El vínculo que los actores de la ficción de Telecinco establecieron a lo largo de las ocho temporadas ha traspasado la pantalla. Víctor Elías no solo mantiene una estrecha amistad con Natalia Sánchez, con quien además mantuvo una relación sentimental de siete años fuera de las cámaras, sino con otros ‘Serrano’. Es el caso de Fran Perea, el actor que dio vida a Marcos, el primogénito de Diego Serrano.
Además de ser amiguísimos, el cantautor malagueño quiso contar con su ficticio hermano para ‘Viaja la palabra’, un trabajo con canciones “hechas a fuego lento”. Víctor y Fran volvieron a unir caminos y talento y compartieron horas y horas encerrados en el estudio de grabación, además de multitud de directos. Los músicos no dudaron en mostrar su lado más solidario cuando estalló la pandemia del coronavirus y se encargaron de amenizar la cuarentena a sus seguidores con la interpretación conjunta de una de las inolvidables canciones del repertorio de la serie, ‘La vida al revés’.
Por supuesto, la estética del madrileño también se ha transformado por completo. La evolución en la industria musical de Víctor Elías ha estado acompañada por un progresivo cambio de imagen, con el que ha logrado alcanzar la apariencia de una auténtica estrella de rock.
A juzgar por las imágenes, no cabe duda de que al travieso de Guille le ha sentado a la perfección el paso del tiempo. Víctor ha desarrollado un buen gusto por la moda y las tendencias, con las camisas estampadas como protagonistas de armario, además de una adicción a los tatuajes, que se han convertido en su principal seña de identidad. La música no parece ser la pasión del intérprete, quien ha marcado buena parte de su cuerpo a golpe de tinta. Esto último quizás no fuera del agrado de Diego Serrano, que probablemente acabaría amenazando a su ficticio hijo mediano con la escobilla.