Laura Matamoros se encuentra esperando a su segundo hijo. La ganadora de 'GH VIP' acaba de entrar en su tercer trimestre de embarazo y, si todo va como lo esperado, a finales de este año podrá tener en brazos a su deseado segundo hijo en común con Benji Aparicio. La influencer continúa experimentando molestias y síntomas propios de la gestación y esta mañana se ha levantado completamente hinchada. No obstante, a su lado ha estado el pequeño Mati, que está ejerciendo como el mejor enfermero de su mami.
El primogénito de Laura y Benji está cuidando a su mamá todo lo que puede y más. La hija de Kiko Matamoros y la hermana de Mar Flores ha amanecido esta mañana con el rostro completamente hinchado. "Hoy me he levantado hinchada como un globo y me estoy poniendo frío. Los ojos no los puedo abrir y mis manos son chorizos. Las cosas del embarazo", escribe la hija del colaborador de 'Sálvame'.
No obstante, a pesar de estas molestias completamente normales, todo es mucho más llevadero gracias a Matías. El pequeño no ha dudado en atender a su madre en este complicado día y masajear su barriguita. Un precioso gesto con el que muestra las ganas que tiene de convertirse en hermano mayor y también de conocer al que a buen seguro se convertirá en su ideal compañero de juegos.
Laura no ha podido evitar compartir con sus seguidores este especial y tierno momento entre madre e hijo. Un instante en el que el pequeño no solo se conforma con acariciar y mimar la cada vez más abultada barriguita de Laura Matamoros, sino que también se atreve a besarla y a mandar un mensaje a su futuro hermano. "Sabes que te quiero, ¿verdad?", dice dirigiéndose a la tripa de su madre mientras esta se derrite y muere de amor.
La joven está disfrutando mientras comparte con su primer hijo este nuevo embarazo. Aunque desde el primer día Laura hizo saber a Mati que pronto tendría un nuevo hermanito, probablemente el pequeño no haya sido verdaderamente consciente del hecho hasta hace muy poco. Hace apenas unos días, la hermana de Anita Matamoros publicaba otro precioso momento al compartir la reacción de su retoño sintiendo la primera patadita del bebé que espera. "Ahora sí que me puedo morir en paz", decía emocionada.