Doña Ana, madre de Isabel Pantoja, se encuentra hospitalizada desde hace unos días. El estado de salud de la abuela de Kiko Rivera podría ser "muy grave" y, en las últimas horas, el entorno de la familia Pantoja alertaba de que se temía por la vida de la matriarca del clan. Esta situación ha hecho que el hijo de la tonadillera de un importante paso con respecto a la guerra familiar y se plantee acercarse a ellos – al menos de forma temporal –.
Kiko, que no tiene relación actual ni con su madre, su tío Agustín y otros miembros de la familia Pantoja – entre ellos y debido a esta situación, su propia abuela – ha asegurado haberse enterado de las malas noticias por la prensa. A través de sus redes sociales, el cantante se ha mostrado preocupado y no ha ocultado el malestar que siente al no poder estar acompañando a doña Ana en estos últimos difíciles momentos.
Consciente de que cabe la posibilidad de que su abuela materna muera en el hospital gaditano de Puerto Real en el que permanece ingresada, y temiendo no volver a verla y no poder despedirse, Kiko se ha puesto en contacto con su prima Anabel para tomar una decisión al respecto. La prima del artista, que acaba de contraer matrimonio con Omar Sánchez, también podría haberse enterado por los medios del delicado estado de salud de doña Ana. A pesar de la felicidad que siente después de haber casado en los juzgados, la colaboradora también estaría sufriendo mucho con toda esta historia. Algo que podría llevar a los dos primos a reunirse de nuevo y acercar posturas por su abuela.
"No sé cómo está. Sabéis que no me hablo con mi familia y tampoco nadie me ha avisado. Me he enterado igual que todos vosotros. Creo que tanto yo, como mi prima Anabel, porque ayer estuvimos hablando sobre ello", comenta el marido de Irene Rosales con cierto tono de preocupación en su voz.
Para él su abuela ha sido una de las personas más especiales de su vida y siempre ha estado muy unido a ella. Recientemente, el hijo del difunto Fran Rivera, mandaba un mensaje a la madre de su madre por 90 su cumpleaños, mientras se disculpaba por no poder estar presente en una fecha tan señalada. En aquel momento, el conflicto familiar pesaba más, aunque ahora, tras conocerse que el estado de salud de Ana Martín se ha resentido gravemente, Kiko podría cambiar de postura.
"Me tiene un poco angustiado, la verdad, ya fuera de tonterías", asegura dejando claro que le da igual haberse enterado de este modo, ya que al final eso es lo de menos. "Y no sé muy bien cómo actuar", continúa pensativo "Vamos a ver si nos podemos enterar de alguna manera más certera, aunque bueno, parece ser que la cosa está como está. Es una situación muy extraña", concluye.