El pasado jueves terminó la aventura de Marc Florensa como participante de ‘GH Dúo’. El catalán llegó a Guadalix en calidad de ex representante de Ana María Aldón, con la que no acabó en el mejor de los términos, pero siendo un completo desconocido para la audiencia. En Outdoor nos hemos propuesto conocer en profundidad su vida anterior.
Barcelonés de 34 años empezó su carrera mediática como blogger y haciendo pinitos de modelo mientras estudiaba la carrera de psicología. Las redes sociales cambiaron su mundo y hace diez años decidió fundar una agencia de comunicación destinada a la comunicación digital de marcas y creadores de contenido. Además de con Ana María Aldón y su hija Gema ha llevado campañas protagonizadas por Terelu, Carmen Borrego o Anabel Pantoja. Con Alexia Rivas, con la que también ha trabajado, mantiene una gran amistad.
Antes de su participación en el reality, Marc ya se había dejado ver en difentes espacios de televisión: ha sido colaborador en programas del circuito municipal de televisión y también ha intervenido en varias ocasiones en espacios como ‘Socialité’ y ‘Cazamariposas’. En la radio presentó el programa ‘Flaixmati’, un programa despertador de una emisora musical catalana.
En el plano personal, la relación de Marc con sus padres no ha sido idílica: confiesa que nunca ha sido especialmente cariñoso con ellos y que abandonó el domicilio familiar cuando tenía tan solo 13 años. Sin embargo, se siente agradecido con ellos porque financiaron todos sus caprichos de juventud: “Han financiado todo en mi vida: mis estudios, mis caprichos y yo, a cambio he tenido una actitud de pasotismo y queja, siempre exigiendo más”, comentaba hace un tiempo en una bitácora. Sin embargo, la pasada navidad colgaba en sus redes sociales una estampa muy emotiva rodeado de los suyos.
Marc está muy enamorado de su novio, Sergi Rivas, con el que mantiene una relación sentimental más que afianzada: llevan juntos más de diez años. En las redes sociales de ambos encontramos fotografías incunables que dan buena cuenta de su prolongada historia de amor. A pesar de que Sergi reside en Zurich por motivos profesionales (trabaja en una agencia de publicidad), viaja con frecuencia hasta Barcelona para disfrutar tiempo de calidad con su pareja.