A sus casi 38 años, Anabel Pantoja está embarazada por primera vez y no puede estar más feliz porque, pese a que nunca había querido ser madre, sí que le apetecía dar este paso junto a su actual novio, David Rodríguez, un fisioterapeuta cordobés nueve años menor que ella. "Hemos buscado el bebé", ha confirmado la exconcursante de 'Supervivientes' a la revista 'Lecturas' en una entrevista en la que se ha animado a hablar de sus suegros por primera vez.
"Sus padres son muy jóvenes, tuvieron a su hermana con 17 o 18 años, tienen tres hijos y su familia es preciosa", ha comentado la influencer, que no tiene ninguna duda de que su chico va a ser "el mejor" padre porque ha recibido de sus padres "una educación excelente": "[El bebé] disciplina va a tener. [David] es muy cariñoso, vamos a ser un buen equipo, lo va a hacer muy bien a pesar de ser joven".
Con esos comentarios, la sobrina de Isabel Pantoja ha dejado claro que se lleva fenomenal con su familia política y que cree que su bebé crecerá en el mejor ambiente y con la mejor educación. Pero ese no ha sido el único comentario que ha hecho sobre sus suegros, de los que nunca había hablado antes ni había compartido fotos en sus redes sociales; pues también ha revelado que han sido ellos los que les han hecho el primer regalo para su bebé, del que todavía no conoce el sexo.
"El Día de la Madre mis suegros me regalaron el maletín que llevas al hospital, me hizo mucha ilusión", ha destapado Anabel, que también ella ha querido comprarle un primer regalo a su bebé que ya le ha entregado a David. Se trata de un body que pone 'Baby Shark' ['tiburón bebé' en español] que compró en Santa Mónica durante su viaje a Estados Unidos para su sección en 'TardeAR' porque ambos son grandes amantes de los tiburones: "Quiero decorarle la habitación con cosas del mar, con pececitos".
Ese body ha sido lo primero que la prima de Isa Pantoja le ha comprado a su bebé, pero también fantasea con comprar un remolque para llevarlo en la bicicleta en sus paseos por Arguineguín, el pueblo de Gran Canaria en el que vive, y un carricoche que se pueda plegar fácilmente para poder viajar en avión porque desea que su futuro hijo o hija disfrute volando como hace ella.